Los empresarios, responsables de las infracciones de sus conductores

La gran mayoría de los camioneros franceses no compartía ayer el optimismo gubernamental sobre el acuerdo del Arca de la Defensa. Los camioneros seguían exigiendo la abolición pura y simple del sistema de puntos del carné de conducir, o al menos, la creación de un régimen especial para los profesionales del volante.El acuerdo no satisface estas dos exigencias, pero contempla mejoras en las condiciones laborales de los conductores y les garantiza la conservación de sus empleos en caso de suspensión o anulación del carné. Tan sólo da satisfacción a una petición de los camioneros: la corresponsabilidad de sus patronos.

Ese acuerdo, adoptado por tres ministros, las organizaciones patronales del sector del transporte por carretera y los sindicatos obreros tradicionales, fue considerado como "histórico" por el Gobierno socialista. El primer ministro, Bérégovoy, había dejado claro que no aceptaría una retirada del nuevo sistema que otorga seis puntos a cada carné de conducir y retira uno, dos o tres, según la gravedad de la infracción.

El tiempo de trabajo de los conductores, según el acuerdo del Arca de la Defensa, pasará de 42 horas semanales a 41. Los empresarios se comprometen a dar empleos sedentarios a los conductores castigados con la suspensión o anulación del carné de conducir.

Los patronos de las empresas de transportes serán responsables en los casos en qué, por exigencias suyas, los conductores sean sancionados por circular a velocidad excesiva o no respetar la obligación de reposo. También pagarán los cursillos que permiten recuperar los puntos perdidos a causa de infracciones.

El tiempo empleado en tales cursillos será remunerado como si fuera tiempo de trabajo. Sin embargo, los camioneros siguen descontentos porque no se sienten representados por ninguno de los firmantes del acuerdo.