La reunión Gobierno-sindicatos es "un punto de inflexión en la dirección que todos queríamos, según Rosa Conde

Rosa Conde, ministra portavoz del Gobierno, calificó ayer en Sevilla de "punto de inflexión en una dirección que todos queríamos" el encuentro del pasado lunes entre el presidente del Gobierno y los líderes sindicales.La portavoz del Gobierno insistió en que estos procesos de negociación son largos y que necesitan un esfuerzo común. A este respecto señaló: "Ambas partes hemos hecho el esfuerzo de buscar elementos en común". Por último, Rosa Conde afirmó que el Gobierno "va a intentar abrir una vía que nos permita hacer lo que tenemos que hacer con el mayor grado de consenso posible".

El ministro de Trabajo, Luis Martínez Noval, hizo también ayer una valoración positiva del encuentro con los sindicatos y aseguró que "hay una buena ocasión para impulsar de nuevo el diálogo social". La larga duración de la entrevista y el desbloqueo de cuestiones hasta ahora paralizadas como la reforma del Inem, de la formación profesional y las modalidades de contratación temporal, fueron destacadas por el ministro, quien espera que sea posible "dar un poco de calor al diálogo". Minutos antes de debatir en el Senado la ley que reforma las prestaciones por desempleo, Martínez Noval declaró que es partidario de que el debate se reanude con la mayor brevedad posible, "con agilidad en la discusión`.

Las ejecutivas de los sindicatos UGT y CC OO analizaron ayer el contenido del encuentro de sus líderes con Felipe González. Comisiones difundió una declaración en la que muestra su disposición a una concertación "rápida y fluida" con el Gobierno. Su opinión es que esta primera entrevista "puede y debe contribuir a recuperar un diálogo entre Gobierno y sindicatos, capaz de definir un nuevo marco de concertación social".

No obstante, CC OO no elude las dificultades que pueden aparecer en este proceso, si bien expresa su esperanza de que "será útil y beneficioso para los trabajadores, haya pocos, muchos o ningún acuerdo".

La dirección de UGT envió ayer mismo a sus cuadros una carta circular de su secretario general, Nicolás Redondo, en la que se limita a afirmar que la reunión "ha dejado incógnitas así como algún aspecto negativo" y, sin calificativo alguno, describe el estado de cada una de las demandas sindicales -cobertura del desempleo, reforma del Inem, contratación temporal, formación profesional, ley de huelga, ley de salud laboral y política industrial-.

Redondo es algo más explícito cuando habla del programa de convergencia y del pacto de rentas y afirma: "Hemos expresado nuestra negativa a negociar esta cuestión que implica en realidad la política económica para los próximos años" y muestra sus reservas a tratarlo en el futuro Consejo Económico y Social porque "es un órgano consultivo y no de negociación".