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La recuperación de la economía española tendrá que esperar al año próximo, según la OCDE

Los expertos de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) apuestan por una mejora de los resultados de la economía española en 1993, y ello gracias al programa de convergencia europea, las nuevas medidas de política estructural y la recuperación general en la zona cubierta por esa organización. En su balance semestral sobre perspectivas económicas, la OCDE constata que, no obstante, la economía española sigue sufriendo durante 1992 sus crónicos males de inflación elevada y déficit excesivo de las administraciones públicas.

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Una mejora coyuntural

Los resultados de la economía española deben mejorar en 1993, según el informe difundido en la sede parisiense de esta organización. La hipótesis en que se basa esta visión optimista es una restricción de la política presupuestaria, de acuerdo con las normas de convergencia establecidas en Maastricht, y una desaceleración de los incrementos salariales debida a la relativa atonía del mercado de trabajo en 1992.La reducción de las tensiones inflacionistas, conjugada con una recuperación en la zona de la OCDE, puede situar el crecimiento del PIB español del año 1993 en un 3,25%, lo que a su vez puede permitir reducir el nivel de desempleo al 15%, su nivel más bajo registrado desde hace una década.

Pero si los expertos de la OCDE contemplan con moderada esperanza la situación de la economía española el año próximo, constatan la persistencia en el período actual de los males "crónicos" que denuncian sistematicamente.

La inflación -"con una tendencia a situarse con facilidad en torno al 6,5% o 7%"- sigue siendo "muy alta", y el déficit de las administraciones públicas en 1991 fue "más importante de lo previsto".

Este último fenómeno es explicado por una reducción de los ingresos fiscales y un gasto excesivo por parte de las administraciones públicas. La OCDE cree que el Gobierno español no conseguirá alcanzar en 1992 su objetivo de disminuir ligeramente el déficit de las administraciones públicas.

En los primeros meses de este año, el crecimiento del producto interior bruto ha sido más lento que las hipótesis de los presupuestos nacionales y más rápida el alza de los salarlos de los funcionarios. "Teniendo en cuenta, los gastos excesivos de las administraciones regionales y del sistema de seguridad social, el déficit del conjunto de las administraciones públicas alcanzará a finales de 1992 un 4,9% del PIB", según señala el informe.

Salarios

Según las estimaciones de los expertos internacionales de la OCDE, el alza de los precios al consumo se situará a finales de 1992 en torno al 5,5% o el 6%, a causa de unas subidas salariales situadas en torno a una media del 7% y un alza demasiado rápida de los precios de los servicios provocada por la Exposición Universal de Sevilla y los Juegos Olímpicos de Barcelona.

El consumo privado se incrementará en un 3% en 1992 merced a las ventas de los vehículos estimulada por la baja del IVA. A causa de la paralización de la inversión en construcción de viviendas, la inversión privada será globalmente estacionaria este año.

El consumo y la inversión públicos seguirán siendo, pues, los principales factores de expansión. Sin embargo, la OCDE espera una importante desaceleración de la inversión pública en la segunda mitad de este año, una vez clausurados la Exposición Universal y los Juegos Olímpicos.

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