ETA quiso cometer una matanza en Madrid tras 56 días sin atentados
Un coche bomba cargado de explosivos y tornillos a modo de metralla estalló ayer a las cinco de la tarde en las cercanías del estadio Vicente Calderón, de Madrid, al paso de un convoy policial, y causó nueve heridos. Se trata del primer atentado de ETA tras la operación conjunta hispano-francesa que permitió la desarticulación de la cúpula de la organización terrorista en Bidart el pasado 29 de marzo y la detención de sus integrantes.
En el atentado resultaron heridos siete policías y dos civiles. Sólo uno de los funcionarios presentaba lesiones graves, según el primer parte médico.Un fallo de los terroristas, según informó la policía, evitó una matanza. La carga explosiva fue activada demasiado pronto para los intereses de los miembros del comando, y no alcanzó de lleno a ninguno de los dos furgones del convoy. "Se han salvado de milagro; de otro modo, habría sido una carnicería", señaló un mando policial al conocer los hechos.
Los agentes se dirigían al estadio del Atlético de Madrid para cubrir a caballo el servicio de seguridad en el partido entre ,el titular del campo y el Logroñés. Fuentes oficiales señalaron que este convoy cambia habitualmente de recorrido para dirigirse al estadio, siguiendo las normas de seguridad y prevención de atentados, pero debe pasar de forma obligada por la travesía de Iván de Vargas, donde fue colocado el coche bomba.
El estadio Vicente Calderón se encuentra junto al río Manzanares, en el suroeste de Madrid, donde ETA ha perpetrado numerosos atentados en el último año.
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