Guatemala trata de mejorar sus relaciones con España
El presidente de Guatemala, Jorge Serrano, inicia hoy una visita a Madrid y Andalucía en la que intentará desbloquear con el presidente Felipe González uno de los más serios contenciosos que tiene España con un país latinoamericano y que impide la potenciación de relaciones bilaterales, indican fuentes diplomáticas. España espera que ese Gobierno reconozca el carácter público de una deuda de 25.000 millones de pesetas, importe impagado de una fábrica de papel construida por empresas españolas en Guatemala en 1984 y escollo que impide la firma de acuerdos de cooperación o la concesión de créditos españoles.
La visita ha generado numerosas protestas en Guatemala. Las principales fuerzas políticas del país la consideran desproporcionada, ya que Serrano volverá a España dentro de dos meses con motivo de la II Cumbre Iberoamericana. Serrano abandonó sin previo aviso el país el jueves por la noche para pasar dos días de descanso en Miami (EE UU) y suspendió las visitas a Estrasburgo y Ginebra previstas para antes de su llegada a Madrid. En Ginebra, el presidente guatemalteco debía encarar las acusaciones que señalan a su país como uno de los infiernos donde con mayor impunidad se violan los derechos humanos mediante el crimen organizado. La visita, ahora pospuesta, le ha costado el puesto al portavoz gubernamental, Gonzalo Asturias. Al Gobierno se le ocurrió, en su afán por demostrar que Guatemala está cambiando con un presidente elegido por la voluntad popular, insertar publicidad en los periódicos adjudicándole a la Comisión de Derechos de la ONU un dictamen favorable a las terrible fuerzas paramilitares (defensa civil), autoras de los más abominables crímenes.
La ONU reaccionó rápidamente y negó que apoyara la presencia de tales grupos, cuya extinción reclama insistentemente la guerrilla en el proceso de paz que negocia a duras penas con el Gobierno de Serrano en México. Estas fuerzas paramilitares están compuestas por medio millón de personas armadas que, además de hacerle un trabajo subsidiario de vigilancia al Ejército, actúan como vehículo de delación popular.
Almuerzo en la Zarzuela
El presidente guatemalteco se entrevistará dos veces con González, almorzará hoy en el palacio de la Zarzuela con los Reyes, que le ofrecerán por la noche una cena de gala, y visitará también el Congreso y el Ayuntamiento, antes de viajar el miércoles a la Expo sevillana y a Jérez de la Frontera. Regresará a su país el sábado. Aunque los lazos políticos con Guatemala son escasos desde que se restablecieron relaciones diplomáticas, a los cuatro años del sangriento asalto a la Embajada española en 1980, Madrid ha jugado un papel destacado al alentar el diálogo entre el Gobierno, las fuerzas políticas legales y la guerilla. Hace dos años, una de estas rondas negociadoras se celebró en El Escorial.
El presidente de Guaternala, nación de mayoría indígena, viaja a España acompañado de su esposa y de los ministros de Relaciones Exteriores, Gonzalo Menéndez Park; Educación, María Luisa Beltranena, y Economía, Juan Luis Mirón.
Una organización humanitaria no gubernamental, Amigos de los Indios, ha manifestado su intención de pedir a Serrano que lleve "la paz a las comunidades indígenas".
