_
_
_
_
_

John Major afirma que el federalismo europeo no amenaza al Reino Unido

Enric González

El primer ministro de¡ Reino Unido, John Major, afirmó ayer que "todos los países de la Comunidad Europea habrán aprobado los tratados de Maastricht antes de fin de año, cuando concluya la presidencia británica". Major abrió en la Cámara de los Comunes el debate sobre los tratados de Maastricht, que serán votados esta noche, con una intervención en la que expresó su seguridad de que el federalismo europeo "ya no constituye una amenaza". "Existe todavía un cierto riesgo de centralismo por parte de Bruselas", dijo, "pero somos lo bastante fuertes como para vencerlo".

Major afronta el debate sobre la unión política y monetaria europea con gran tranquilidad. La victoria del sí está prácticamente asegurada, y la presidencia comunitaria a partir de julio le permitirá insistir en sus prioridades para la CE: ampliación con el ingreso de países como Suiza, Austria, Hungría, Checoslovaquia y Polonia, y consecución de un mercado único fluido y antiproteccionista.Entre las garantías que ofreció a los parlamentarios más tibios ante la Comunidad, Major subrayó que el Reino Unido "se libró en Maastricht de la Carta Social Europea, que no supone otra cosa que la amenaza de un nuevo centralismo, esta vez sindical, ejercido por Bruselas". El primer ministro insistió en la necesidad de que el principio de subsidiariedad comunitaria (descentralización de decisiones siempre que sea posible) se aplique al máximo. Un grupo de parlamentarios escoceses, que había boicoteado el inicio del debate para exigir autonomía para Escocia, aprovechó la insistencia de Major para pedirle "subsidiariedad también en el Reino Unido". "Esto es, una unidad, un Reino Unido", replicó secamente el líder conservador.

Major también fue tajante al referirse a la creación del "fondo de cohesión", acordado en Maastriclit para redistribuir recursos desde los países más ricos hacia los más pobres, y especialmente reclamado por España. "Respecto a esto", dijo, "les garantizo que no renunciaré a la rebaja conseguida por mi predecesora [un descuento de unos 350.000 millones de pesetas en la contribución británica al presupuesto comunitario, logrado por Margaret Thatcher en 1984] y no aceptaré que nuestra actual contribución se recargue un solo penique".El Parlamento de Westminster votará esta noche, salvo imprevistos, la aprobación o rechazo de los tratados de Maastricht, y la victoria del sí parece asegurada. Los conservadores euroescépticos, que harán caso omiso a las instrucciones del partido y votarán negativamente, no superan la veintena. Los 20 liberal-demócratas de Paddy Ashdown votarán sí, lo que garantiza un mínimo de 330 votos afirmativos (310 conservadores más 20 liberal-demócratas), cuatro más de los necesarios para alcanzar la mayoría simple.

Abstención laborista

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El Partido Laborista instruirá a sus parlamentarios para que se abstengan, con la excusa de que no puede apoyar un tratado que, por parte británica, no acepta la Carta Social Europea y se reserva la decisión final sobre la unión monetaria.

La abstención supone que la oposición parlamentaria prefiere no definirse en el que ha sido calificado como el debate más trascendental de los últimos 20 años. Algunos diputados del partido señalan que esta inhibición se debe a dos factores: el deseo de no comprometer al futuro líder del partido (el europeísta John Smith o el más escéptico Bryan Gould) con la adopción de una posición firme sobre Europa; y que Neil Kinnock aspira a la presidencia de la Confederación Socialista Europea, y un voto negativo dañaría irremediablemente sus aspiraciones.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_