Un atracador de bancos, detenido tras huir hace dos años de la cárcel
Un atracador de 34 años ha regresado a la cárcel después de haber desaparecido de la prisión de Zamora hace dos años. Antonio González de Pablo se marchó durante un permiso de la prisión, donde cumplía condena por atraco con rehenes.
El hombre ha sido detenido en Arcicoller (Toledo), en un chalé que había comprado hacía pocos meses. La policía, que considera a González de Pablo "un delincuente peligroso" le vincula con cinco atracos a diferentes oficinas bancarias, una vez que se escapó de la prisión, en abril y junio del pasado año y en marzo de 1992.
En uno de los golpes, en una sucursal de Caja Madrid en Móstoles, el delincuente se llevó siete millones de pesetas, aunque olvidó una bolsa con seis. González de Pablo, con tres reclamaciones judiciales pendientes, usaba coches robados y bigotes o barbas postizas para atracar. En otro de los atracos, perpetrado en Fuenlabrada, se llevó 17 millones de pesetas.
Cuando los agentes entraron en el chalé, el presunto atracador escapó escaleras arriba para, según la policía, alcanzar sus armas, dos revólveres Astra del calibre 38 que habían sido robados a vigilantes jurados durante otros dos atracos en Madrid. El primero fue en una sucursal del Banco de Crédito y Comercio, en la calle de Rafael Salgado. El segundo, en una oficina de Banesto de la calle de Gaztambide. En este último asalto, cometido hace aproximadamente un año, sus víctimas fueron dos guardas jurados de un furgón blindado.
Los policías lograron alcanzar a González de Pablo y descubrieron documentación falsa, además de 1.68 1.000 pesetas.
Según fuentes de la Jefatura Superior de Policía, el atracador apenas salía del chalé, que había puesto a nombre de su suegra, salvo para perpetrar los atracos.
