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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Camino pedregoso

La conclusión de Elena F. L. Ochoa en su artículo La dialéctica del feminismo está tan lejos de la realidad como yo estuve siempre de todo movimiento feminista, convencida de que la única alternativa que le queda a la mujer para salir de la histórica inercia en que nos aposentaron durante siglos implica una lucha personal. Como dice Steinem (y Elena nos lo recuerda en su artículo), "el camino está en potenciar la autoestima y la seguridad que cada mujer lleva dentro como cualquier ser humano. En definitiva, tener conciencia individual, sin la cual no llegaremos a ninguna parte".Pero la realidad a la que me refería es la supuesta libertad que hoy en día gozan las mujeres de elegir entre ocupar puestos de trabajo (una vez conseguida la capacidad para ello) y la de quedarse en casa. Y digo supuesta porque la causa fundamental de que en 1985 el 5 1 % de las mujeres americanas preferían trabajar frente al 43% en 1991 podría ser -sin duda es- por la enorme carga y el agotamiento físico e intelectual que han tenido que soportar, sin la más mínima ayuda familiar y total ausencia de estímulos por parte de su marido o pareja que, al tiempo que se sacudían aptitudes enraizadas en el pasado, aceptaron y vieron con cierto agrado cómo la mujer engrosaba la economía familiar,

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pero lo vieron sólo de reojo y, por supuesto, sin renunciar a la cómoda poltrona del home, sweet home. Mientras, sumida la mujer en el stress, le llegaba el desfondamiento que toda superwoman, tarde o temprano, está abocada a padecer. En contra de lo que piensa Elena, el panorama sigue siendo casi el mismo. El camino se nos presenta largo, personal y muy pedregoso hasta que Jane pueda elegir con total libertad, sin sucumbir en el desánimo, quedarse en casa como su mamá o ir a la oficina como su papá. De una cosa estoy segura: su hermano Dick jamás se hará esta pregunta.- Concha Lago Varela.

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