El PP pide "garantías" para reintegrarse en los órganos de control de RTVE

Si Partido Popular y el Gobierno mantienen un difícil diálogo sobre temas generales, en el caso de RTVE éste se ha convertido en un diálogo de sordos. Fuentes de la dirección del PP aseguraron que José María Aznar se negó a abordar la situación de RTVE en su última entrevista con Felipe González, pese a que el tema fue suscitado por el presidente del Gobierno. Fuentes de La Moncloa lo niegan y aseguran que la situación de RTVE ni se mencionó en la conversación. Sea como fuere, el PP ha decidido intensificar su política de gestos y boicoteo a los órganos de control de RTVE.

El Partido Popular ha decidido no volver a la comisión de control parlamentario de RTVE y al Consejo de Administración del Ente Público hasta tener la "plena convicción" de que la radio-televisión estatal "ha dejado de ser un órgano de propaganda del Gobierno". "Somos conscientes de que igual no volvemos en esta legislatura", indicó una fuente de la dirección del Partido Popular.La dirección de RTVE ha declinado hasta el momento responder a las críticas de los consejeros populares o comentar su retirada del pleno. Sin embargo, fuentes de la dirección han confirmado que se baraja la posibilidad de retirarles el sueldo si mantienen su postura de boicoteo del Consejo.

A fin de no dar la sensación ante la opinión pública de que abandonan las instituciones, los diputados populares han recibido instrucciones de realizar gestos de presencia. Así, el próximo miércoles éstos diputados, con Javier Arenas al frente, se situarán en la puerta de la comisión parlamentaria antes de la sesión en la que comparecerá el director general, Jordi García Candau, y entregarán a la prensa un documento sobre la situación en RTVE.

Los miembros del Consejo de RTVE tampoco se reintegrarán a las sesiones del pleno o las de las comisiones del consejo hasta que "reciban garantías" de que "pueden realizar una labor digna". Diputados y consejeros abandonaron la comisión parlamentaria y el Consejo de RTVE a finales de marzo, como gesto de protesta por lo que consideran limitaciones a sus funciones de control de la dirección general del Ente.

La difamación

La estrategia del PP pasa también por incrementar las preguntas e interpelaciones parlamentarias sobre RTVE en el pleno del Congreso de los Diputados. Fuentes del PP indicaron que se preguntará semanalmente al Gobierno, en las sesiones de control, y que, en mayo, se presentará una interpelación al Gobierno sobre su política respecto a los medios de comunicación. Esta interpelación intentará abarcar aspectos más amplios que la situación de RTVE e incluirá temas como la figura de la difamación, que se quiere incluir en el nuevo Código Penal, o la competencia desleal que, según el PP, los medios públicos realizan con los medios privados. La interpelación será seguida, de una moción en la que se pedirá la reforma del Estatuto de RTVE.

Las divergencias entre socialistas y populares sobre RTVE alcanzan a saber si figuró o no en la agenda de las conversaciones entre Felipe González y José María Aznar. El PP mantiene que Aznar decidió excluir el asunto de su agenda durante su última entrevista con Felipe González, pese a que el presidente del Gobierno abordó el tema durante la entrevista.

Aznar mantiene que no tiene ningún sentido dialogar con el Gobierno sobre RTVE, dado que no ve, por el momento, que se puedan aproximar los criterios. En su opinión, el Gobierno no quiere entender cuál es el proyecto del PP para RTVE y se limita a plantear una mayor presencia de la oposición en los informativos o proponer un cambio de personas al frente de los servicios informativos.