Mil millones de espectadores

La gala de inauguración de la Expo de Sevilla, el próximo 19 de abril, será contemplada por mil millones de espectadores a través de 60 canales de televisión de todo el mundo, según dijo ayer el comisario de la muestra, Emilio Cassinello. Esta cifra da una idea aproximada del inmenso alcance que tendrán algunas de las 55.000 actuaciones diferentes programadas durante los 176 días que permanecerá abierta la exposición, con un coste total de 18.000 millones.

Los espectáculos al aire libre de carácter popular son los más numerosos. El 80% de las actuaciones son de acceso gratuito. "Aunque esperamos 18 millones de visitantes en los seis meses, vamos a llevar la exposición a muchos más. Concebimos el recinto como un gran plató de televisión, y la exposición como un acontecimiento de comunicación multilateral de alcance global", dijo el comisario. Estos datos convierten a la Expo en una "plataforma de comunicación multilateral cuya materia de intercambio son las ideas, los sentimientos y las imágenes nacionales". Los datos estadísticos aportados por Cassinello confirman la envergadura formidable de los espectáculos.En total actuarán 20.000 artistas, lo que da un promedio de 500 diarios. Los trece espacios abiertos de que dispone para espectáculos el recinto de la Cartuja tendrán un uso continuado de 19 horas por jornada. Además, noventa pabellones tienen preparados espectáculos en sus propios escenarios. "Todo esto permite afirmar sin ánimo de exageración que la Expo es el mayor escenario del mundo", añadió Cassinello.

En cuanto a las actuaciones en espacios cerrados, a excepción del cine, predomina la música clásica. La organización tuvo que recomendar a algunos de los países participantes que, en lugar de más orquestas filarmónicas, enviarán espectáculos autóctonos representativos de sus peculiaridades. El recién estrenado teatro de la Maestranza será el escenario donde se escenificarán catorce óperas. También habrá 54 conciertos a cargo de las cuarenta orquestas más representativas de la música clásica mundial. En cuanto al teatro, se presentarán 52 producciones.

De la ópera a la salsa

Las de corte clásico se representarán en el teatro Lope de Vega, construido en 1929 para la exposición Iberoamericana. Dos montajes serán estrenos absolutos: la versión de Don Quijote de Maurizio Scaparro; y la de La vida es sueño de Calderón por el teatro Rustavelli dirigido por Robert Sturua. El teatro Central de la Expo cobijará las funciones más vanguardistas y de experimentación, mientras que el anfiteatro de Itálica será el marco de las actuaciones de ballet, al que tienen previsto concurrir compañías tan prestigiosas como la de Martha Graham o Les Grands Ballets Canadiens.

En el recinto de la exposición, el Palenque será la gran pista de baile. En este espacio, en el que pueden permanecer a la vez 3.000 personas, actuarán numerosos grupos de salsa y grandes orquestas de baile, como la célebre de Glenn Miller. Además, a diario, habrá una cabalgata con 200 personas y quince carrozas y, a partir de las 22 horas, el centro se traslada al lago, soporte de un espectáculo multimedia que combina las técnicas del láser.