El 85,5% del profesorado considera mal valorado su trabajo por la sociedad

El 85,5% de los profesores de enseñanza primaria y secundaria considera que su trabajo está insuficientemente reconocido por la sociedad, según se desprende de una encuesta realizada por un equipo de sociólogos independientes por encargo de la Federación de Enseñanza de CC OO.Pese a esa convicción, la encuesta (sobre una muestra de 894 profesores, representativa de un universo de 263.773 docentes y un margen de fiabilidad del 95%) revela un alto nivel de aceptación de la propia profesión, puesto que el 80,6% no quiere abandonarla y sólo el 6,8% tiene la intención de hacerlo.

Fernando Lezcano, secretario general de la Federación de Enseñanza de CC OO, considera que esta firmeza en la voluntad de permanencia en la profesión docente no debería interpretase como una respuesta obvia en el contexto de un clima general de inestabilidad laboral y el consiguiente temor al desempleo.

En su opinión, es un dato positivo que la Administración educativa española y la sociedad en general debería tener en cuenta porque no guarda relación con lo que está sucediendo en el resto de Europa, donde se advierte una tendencia sostenida a la deserción ante la vocación docente. El sondeo de CC OO revela un alto grado de "tensión emocional" en el ejercicio docente, debido a que la mayoría se siente en medio de un exceso de expectativas por parte de la sociedad ante las reformas anunciadas por la Administración y una carencia muy notable de recursos, infraestructuras e incluso de información.

La falta de información sobre la reforma la acusa especialmente el colectivo de profesores de formación profesional. El mismo que detecta las carencias mayores en materia de equipamiento, espacios e instalaciones en los centros. Así lo ve el 73,1% de dicho colectivo, pero también el 71,6% de los profesores de BUP y el 60,3% de los de EGB.

En materia de carencias, los profesores apuntan autocríticamente a las de su propia formación. Así, el 58,5% considera insuficiente su formación en conocimientos, en técnicas didácticas o en ambos aspectos.

Y si, como interpretan los autores del estudio, el índice de participación en programas oficiales de formación permanente no es congruente con la percepción de su necesidad, ello debe ser debido a un planteamiento inadecuado de aquéllos.