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Pedro Olea dirige un filme de amor y suspense

Assumpta Serna luce sus dotes de espadachina en 'El maestro de esgrima'

Elsa Fernández-Santos

El director de cine Pedro Olea soñaba desde hace tiempo con llevar al cine El maestro de esgrima, la novela homónima de Arturo Pérez Reverte. El viejo sueño se ha hecho realidad y, desde hace cinco semanas, Olea rueda en Madrid, Segovia, Toledo y Aranjuez esta historia de misterio, "terriblemente romántica" según su director. El actor italiano Omero Antonutti y la actriz catalana Assumpta Serna son, junto al actor portugués Joaquim de Almeida, los principales intérpretes del filme, situado en la revolución de 1868.

"Esta es mi película", dice Olea, que está tan relajado y contento que sorprende. "Es que yo me lo paso tan bien rodando que no puedo ponerme nervioso. Me divierten las historias de época, disfrazar a los actores y reconstruir un momento histórico. Esta historia la tenía en la cabeza desde que leí la novela", añade este vasco director de Tormento y Flor de Otoño, entre otras películas."Un viejo maestro de esgrima vuelve a Madrid cuando la esgrima ya no está de moda y todo el mundo utiliza pistolas. Entonces se le presenta una joven y misteriosa mujer que quiere aprender su arte", relata Olea. "De telón de fondo está una revolución inminente y un triángulo amoroso entre Assumpta Serna, el maestro y Joaquim de Almeida", continúa el director. El viejo maestro es el actor italiano Omero Antonutti, "un personaje decadente, en una época decadente que quiere salvar un arma decadente: el florete", dice el actor. "Pero que conoce a una mujer joven que le hace revivir", añade.

La dama misteriosa es Assumpta Serna, "una mujer que tiene la fascinación y el misterio que requiere el personaje. Aparentemente fría, con varias personalidades que no se le adivinan. Como las mujeres de Hitchcock", dice Olea. "¿Ha dicho eso Olea?. Bueno, si él lo dice... Yo no me siento fría, creo que soy emotiva y muy expresiva cuando hablo", comenta sonriente la actriz catalana, que desde Matador, de Pedro Almodóvar, no había vuelto a trabajar en una película española. Tanto ella como Antonutti han tomado durante un mes y medio cuatro horas díarias de clases de esgrima para interpretar sus personajes. "Para el autor de la novela, mi personaje representa la revolución de Prim. Es una mujer práctica y poco idealista, que tiene mucho que ver con los jóvenes de ahora; por eso es un personaje moderno", cuenta esta mujer amable del distinguida tristeza en el rostro. "Trabajo en muchos sitios y no tengo miedo a perderme entre tantos lugares. Para mí el riesgo sería quedarme en un solo sitio. No tengo residencia fija. Soy como los viejos cómicos".

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Sobre la firma

Elsa Fernández-Santos
Crítica de cine en EL PAÍS y columnista en ICON y SModa. Durante 25 años fue periodista cultural, especializada en cine, en este periódico. Colaboradora del Archivo Lafuente, para el que ha comisariado exposiciones, y del programa de La2 'Historia de Nuestro Cine'. Escribió un libro-entrevista con Manolo Blahnik y el relato ilustrado ‘La bombilla’

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