El inmueble alojaba 50 obras del Museo de la Ciencia de Cataluña

El Museo de la Ciencia y de la Técnica de Cataluña, que colabora con la Exposición Universal, remitió ayer un comunicado en el que se afirma que entre los objetos que se encontraban en el interior del pabellón de los Descubrimientos figuraban medio centenar de piezas que habían sido cedidas,para su exhibición. Esta es la única información oficial facilitada sobre los contenidos a los que afectó el incendio."Pese a que no están consideradas como las de más valor del museo", agrega el comunicado, "hay algunas piezas que será muy difícil poder reponer otra vez, como es el caso de un microscopio electrónico y material agrícola y textil de principios de siglo".

Otros museos catalanes como el de los Automóviles, de Sils (Gerona); el de Vilassar de Dalt (Barcelona) y el de las Artes Gráficas, igualmente de Barcelona, también habían cedido algunas piezas para el pabellón. El Departamento de Cultura de Generalitat señaló que aún no se ha recibido información sobre los objetos que han quedado destruidos.

El museo Claret, de Sils, había cedido un coche de competición marca Ricart, de 1929, fabricado en Barcelona, que es la única pieza de su categoría que quedaba, y una motocicleta New Hudson de 1914, según indicaron fuentes del propio centro.

Cine espacial

La esfera de cine espacial de sis tema Omnimax, situada en un extremo del pabellón de los Descubrimientos, ha quedado intacta y ni siquiera ha sufrido lo efectos del humo, según indicaron los técnicos de la Expo 92 tras una primera inspección. Sólo resta comprobar si el cableado que une la esfera con el resto del inmueble ha sido destruido.

El arquitecto del edificio, Javier Feduchi, y personal de la empresa constructora, Ferrovial recorrieron ayer el pabellón, en el que permaneció durante toda la noche un retén de bomberos. Ninguno de los responsables de la obra quisieron pronunciarse sobre los efectos del siniestro.

La pantalla Omnimax, una de las mejores atracciones que ofrecia el pabellón, permite al patio de butacas experimentar la sensación de estar metido dentro de la película que rodea al espectador. La sala de proyección, de estructura prefabricada, combina una pantalla semiesférica de 2 metros de altura y 24 de diámetro con un potente equipo de sonido y planetario digital.

La película que estaba previsto exhibir, dirigida por Macgillivray Freeman y patrocinada por Alcatel, es un documento científico que sintetiza 500 año de descubrimientos.

Entre las escenas que incluye la proyección, de 15 minutos (aunque se ha rodado con vista a que se pueda prolongar haste 45 minutos), destaca el viaje dc Magallanes, hallazgos de las pinturas de la cueva de Altamira o el lanzamiento del Arianne. Más de 300 millones de pesetas han costado los seis meses de rodaje.