Hacienda pagará a los ayuntamientos 25.000 millones por atrasos de 1990

Los Ayuntamientos alcanzaron ayer un principio de acuerdo con Hacienda para superar el conflicto que las administraciones locales y central mantenían sobre el importe de los fondos que el Estado debe trasferir a los alcaldes por los ejercicios 1990 y 1991. La base del acuerdo es la aplicación, con carácter retroactivo, de la enmienda a los presupuestos de este año que el PSOE introdujo en el Senado en el último momento. Los retrasos que resultan de aplicar ese nuevo criterio pactado al año 1990 ascienden a 25.000 millones de pesetas, cifra sensiblemente inferior a los 110.000 millones que los ayuntamientos solicitaban hace sólo un mes.

[Por otra parte, y según datos de la Dirección General de Gestión Tributarla, Hacienda ingresó en 1990 un 10% menos de lo presupuestado. Ese año, más de dos millones de personas presentaron la declaración del IVA, con un aumento del 6% sobre el año anterior. Los exportadores solicitaron devoluciones por importe de 198.374 millones de pesetas. Las restantes devoluciones suman un importe de 260.771 millones.]En cuanto a las transferencias a los ayuntamientos, el secretario de Estado de Hacienda, Antonio Zabalza, y el presidente de la Federación Española de Municipios (FEMP), Francisco Vázquez, acordaron ayer que el criterio de valoración de los fondos presupuestarios que deben recibir los Ayuntamientos pactado para este año, y que está recogido en los presupuestos, se aplicará con carácter retroactivo para los años 1990 y 1991.

Tras una corta reunión en el Ministerio de Economía y Hacienda, Francisco Vázquez explicó que el acuerdo consta de cuatro puntos. El principal es la aplicación para los años 1990 y 1991 de los criterios de ponderación que se utilizarán este ejercicio. En pesetas, y siempre según el presidente de la FEMP, esto significa que Hacienda debe a los ayuntamientos 25.000 millones de pesetas de atrasos de 1990, y una cuantía muy similar para el año 1991.

Con este punto queda superado el conflicto que Hacienda y la FEMP arrastran desde hace tiempo por diferencias de cálculo sobre la cantidad de recursos presupuestarios que los municipios deben recibir cada año. Hasta diciembre, este conflicto estaba acompañado de una cifra: 110.000 millones, pues a esta cuantía ascendía la diferencia entre lo que Hacienda había transferido a los Ayuntamientos como liquidación de 1990 y lo que estos pensaban que les correspondía.

Hacienda valoró ayer "positivamente" el acuerdo pues "permite reestablecer unas relaciones fluidas que son necesarias para éste y otros proyectos conjuntos".

Límites

La rebaja desde 110. 000 millones hasta los 25.000 millones acordados ayer está acompañada de la supresión del límite de crecimiento del gasto de las diputaciones. Este es el segundo punto del principio de acuerdo alcanzado ayer. Hasta ahora, los presupuestos de cada año limitaban al 18% el crecimiento de la participación de las diputaciones en los ingresos del Estado.

Este límite desaparecerá este mismo año, en la misma ley que pondrá en marcha un crédito extraordinario para abonar los 25.000 millones de 1990 y la cuantía que resulte de 1991, y que Vázquez apuntó cercana también a 25.000 millones. El crédito extraordinario es necesario para cumplir el tercer punto y que consiste en el compromiso, por parte del Estado, de abonar los 25.000 millones de 1990 y la liquidación que resulte de 1991 a lo largo de este ejercicio. El último punto del acuerdo es el compromiso de mantener el mismo sistema de ponderación. Este punto era innecesario ya que la enmienda a los presupuestos modifica la ley de Haciendas Locales y es de obligado cumplimiento.