Gómez Navarro teme que la inhabilitación de Gil provoque el caos en la economía del Atlético

El Secretario de Estado para el Deporte, Javier Gómez-Navarro, dijo ayer estar seriamente preocupado por la situación económica del Atlético de Madrid y por su proceso de conversión en sociedad anónima, ante la posible inhabilitación de su presidente, Jesús Gil. Gómez-Navarro, que no quiso valorar esa posible sanción contra el dirigente rojiblanco, negó que todo fuese una maniobra política, como el propio Gil había denunciado. El Secretario de Estado destacó, además, la importancia del decreto de federaciones deportivas aprobado ayer en Consejo de Ministros.

Gómez Navarro, en una reunión que mantuvo ayer con los medios informativos, restó importancia al cierre del campo del Atlético de Madrid por un partido: "Lo que me preocupa seriamente", aseguró el Secretario de Estado para el Deporte, "es la situación económica en que puede quedar el club por la posible inhabilitación de su presidente, Jesús Gil. También me preocupa cómo puede afectar a su transformación económica al tenerse que convertir en sociedad anónima. ¿Quién va a dirigir este trabajo?"El Consejo Superior de Deportes ha enviado una carta a Gil para que en el plazo de 10 días presente las alegaciones que estime oportunas a la cifra de capital mínimo que la comisión encargada de ello ha fijado al Atlético de Madrid para convertirse en sociedad anónima (2.000 millones de pesetas).

"Si el Atlético desaparece o no, será problema de sus gestores y de los socios que les eligieron y apoyaron. El CSD no tiene capacidad para luchar contra las decisiones democráticas de la masa social de un club", dijo Gómez Navarro. También citó los nombres de otros dos clubes cuya conversión en sociedad anónima le preocupa: el Betis y el Málaga, ambos de Segunda División.

Gómez Navarro, por otro lado, rechazó que la clausura del campo del Atlético de Madrid y la posible inhabilitación de su presidente sean una maniobra política, como ha denunciado Jesús Gil. "No se lo cree ni él. Esta cuestión no merece más comentarios", dijo el Secretario de Estado para el Deporte. Gómez Navarro comentó: "¿Cómo voy a creer en el fraude arbitral que Gil dice que existe? Los árbitros se equivocan y quizás a favor de los equipos grandes, porque es lo más fácil. Esa actitud no es intencionada, sino consecuencia de la sociedad actual".

El Secretario de Estado, por otro lado, calificó de peligrosos los informes que Gil suele proporcionar a sus socios para explicar situciones como las que han merecido la apertura de su expediente. "Por algo más grave, pero de ese estilo, el Consejo Superior de Deportes instó a que se le abriese un expediente que, finalmente, se cerré con una multa de tres millones de pesetas".

Un año fundamental

Gómez Navarro destacó la aprobación ayer en el Consejo de Ministros del decreto de las federaciones deportivas, al que equiparó con el anterior sobre la conversión en sociedades anónimas. "Nos preparamos para un año fundamental para el deporte, como es el de 1992", indicó. "Este año que está a punto de acabar ha sido excelente para nuestro deporte, con la excepción del fútbol, pero el próximo cuenta con la celebración de los Juegos Olímpicos en Barcelona y el gran reto de esta casa [CSDI: la transformación del deporte profesional en sociedades anónimas".

En 1992 se va a cerrar el ciclo del desarrollo de la Ley del Deporte con los decretos contra la violencia y el dopaje y el que regulará a los deportistas de élite. Además, se celebrarán elecciones a la presidencia de las federaciones a través de una nueva asamblea cuya composición se establecerá por una orden ministerial que, estimó Gómez Navarro, podría aprobarse en el primer trimestre del próximo año. La representación en estas asambleas variará y sólo figurarári los clubes y deportistas profesionales a nivel nacional.

El nuevo decreto configura las federaciones deportivas como asociaciones de naturaleza jurídica privada. Asimismo, les atribuye, por vez primera de forma explícita, el ejercicio de funciones públicas administrativas. Según una nota oficial del CSD, "sólo podrá existir una federación por cada modalidad deportiva. Sus aspectos más importantes son: la determinación de las funciones públicas de carácter administrativo, los criterios para la calificación de las competiciones oficiales de ámbito estatal, y la representación internacional de las mismas". El decreto establece que las Ligas Profesionales son figuras jurídicas individualizadas de naturaleza asociativa privada. Se constituirán obligatoriamente en el seno de las estructuras federativas. La coordinación se realizará mediante convenio entre las partes. Este convenio recogerá el calendario, ascensos y descensos, número de jugadores no seleccionables para el equipo nacional, arbitraje y composición de los organismos disciplinarios.