La cumbre islámica reunirá en Dakar a más de 30 jefes de Estado

ENVIADO ESPECIALMás de 30 jefes de Estado se han comprometido a asistir a la sexta cumbre islámica que se celebrará del 9 al 12 de diciembre en Dakar. Entre ellos figuran el rey Hassan II de Marruecos, el rey Fahd de Arabia Saudí, el emir de Kuwait, el presidente Rafsanyani de Irán, el egipcio Mubarak, el indonesio Suharto, el argelino Benyedid, el tunecino Ben Alí y el palestino Yasir Arafat.

Desde el miércoles los ministros de Exteriores de los 45 países miembros de la Organización de la Conferencia Islámica (OCI) se encuentran reunidos en la capital senegalesa para preparar esta cumbre, que durará tres días, y que constituirá uno de los acontecimientos más importantes del mundo musulmán de los últimos años.

En Dakar se espera con expectacíón la llegada de otras delegaciones, como la de las repúblicas islámicas de la Unión Soviética, que han sido invitadas por la secretaría general de la OCI para asistir a la reunión en calidad de observadoras.

El Gobierno iraquí decidió en el último momento boicotear la reunión, alegando que la cumbre está organizada "por Arabia Saudí y alguno de sus vasallos mercenarios". Irak trata de recordar así a la opinión pública que Senegal se alineó con Estados Unidos en la guerra del Golfo y envió un contingente de tropas a Arabia Saudí.

En el orden del día provisional de esta reunión se han establecido 29 puntos, en los que se abordarán temas tan dispares como la causa palestina y el conflicto árabe-israelí, las consecuencias de la agresión iraquí a Kuwait, la situación en Afganistán, Cachemira, Chipre, Suráfrica, Filipinas o Etiopía. Pero por encima de todo destaca el interés de los organizadores en promover los derechos de las comunidades islámicas en el mundo.

El ministro de Asuntos Exteriores senegalés, Djibo Ka, ha recordado en las últimas horas que los 45 países participantes en esta cumbre islámica detentan el 25% de la riqueza de la tierra y reúnen al 50% de la población mundial, pero al mismo tiempo ha reconocido que entre estos países se encuentra la mayor parte de las 25 naciones más pobres del planeta. En base a estos datos el ministro senegalés aseguró que "casi todo lo que se hace y todo lo que pasa en el mundo afecta a la Organización de la Conferencia Islámica".

Atasco aéreo

La organización de la cumbre planteó al Gobierno de Dakar serios problemas tanto de seguridad como de organización. Uno de ellos se refiere al aeropuerto, incapaz de acoger al gran número de aparatos que se concentrarán entre el 9 y el 12 de diciembre. En medios diplomáticos se asegura que podría abrirse excepcionalmente la frontera entre Senegal y Mauritania, cerrada tras los conflictos de 1988. A Hassan II no le pillará el atasco aéreo; ya que el monarca alauí ha anunciado que se desplazará a Dakar en su barco privado.