España no accederá a la petición israelí de eliminar el visado

El Gobierno español no accederá por ahora a la principal reivindicación de Israel para mejorar la relación bilateral entre ambos países: la supresión del visado para los israelíes que visitan España, un trámite del que están exentos los españoles que se desplazan al Estado israelí por decisión unilateral del Ejecutivo de Tel Aviv.

González llegó a la once de la noche de ayer (hora peninsular española) al aeropuerto Ben Gurion y fue recibido por el ministro de Asuntos Exteriores, David Levy, informa Efe. El jefe del Gobierno dijo en el aeropuerto: "Hemos venido a Israel para normalizar definitivamente las relaciones entre los dos países".Con motivo del primer viaje de un jefe de Gobierno español a Israel y del sexto aniversario del establecimiento de relaciones entre ambos países, las autoridades israelíes esperaban que España hiciese el gesto de levantar el visado para todos sus ciudadanos o, por lo menos, para aquellos que disponen de un pasaporte diplomático. Unos 27.500 israelíes viajaron a España en 1990.

La primera medida, recomendada por el Grupo de Schengen a España, está descartada porque, explican fuentes diplomáticas, difícilmente el Ministerio de Asuntos Exteriores puede suprimir ese trámite para Israel cuando acaba de imponérselo a tres países árabes (Marruecos, Argelia y Túnez), aunque estudiará la posibilidad de eliminarlo para los diplomáticos.

Durante la visita que efectuó a España en junio el ministro israelí de Asuntos Exteriores, David Levy, sus interlocutores españoles accedieron a agilizar la concesión de visados a los hombres de negocios israelíes, que además de en los consulados de España en Israel, podían, a partir de entonces, solicitar el documento en seis consulados españoles en Europa. "Además de ser insuficiente, esta disposición no funciona", aseguraron fuentes diplomáticas israelíes.

Hoy, tras acudir junto con su esposa, Carmen Romero, al memorial de los mártires del holocauto nazi, mantendrá su primera entrevista política con el primer ministro, Isaac Shamir, que por la noche le ofrecerá una cena. Por la tarde se reunirá con la Comisión de Asuntos Exteriores y Defensa del Parlamento y saludará al jefe del Estado, Jaim Herzog. En sus entrevistas, González expondrá el punto de vista español y de la Comunidad Europea sobre el conflicto árabe-israelí. Instará, por tanto, a su homólogo israelí a aceptar una solución negociada inspirada en las resoluciones 242 y 338 del Consejo de Seguridad de la ONU .