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El negocio del sexo

60 putas, rescatadas

Francisco Peregil

El único centro oficial de Madrid para atender prostitutas se encuentra en pleno distrito de Centro, zona donde el concejal Ángel Matanzo ha destacado por su animadversión contra tal gremio.

Matanzo ha hecho lo posible por echarlas de la plaza de Benavente, y cuando se enteró de que el local no disponía aún de licencia de apertura y que se habían realizado ciertas obras, intentó cerrarlo. "Las obras eran totalmente legales", afirma la directora del local, Rocío Nieto, y la licencia la solicitamos nada más abrir. Si no nos la dieron, es culpa del Ayuntamiento".

El centro de putas, que es como la consejera de Integración Social gusta llamarle, depende de la Comunidad, que es quien paga a los siete profesionales que trabajan allí.

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Desde el verano del año pasado en que se abrió, se han encontrado con acusaciones tan variopintas como que en el local se acuestan las chicas con sus clientes y que en la puerta se vende droga. La primera acusación tan falsa como verdadera la segunda, según Rocío Nieto. "Me dicen los vecinos que tienen videos de gente vendiendo droga en el portal, pero es que eso en este barrio es lo más normal del mundo. Raro es el portal donde algún día un camello no vende dosis. Pero que nos digan que aquí vienen ellas a acostarse con tíos es como para echarse a llorar".

Fichadas

Hasta el momento tienen localizadas con fichas sociales 158 mujeres, aunque calculan que sólo en las calles del centro hay unas 380 busconas.El hecho del que más presumen los responsables del Gobierno regional es que 58 prostitutas se han retirado de la calle. Trabajan en cursos de formación y empleo, como costura y labores similares. Otras 15 realizan cursos del Inem, pero aún trabajan en la calle.

A las chicas que acuden a la plaza del Ángel, que es donde se encuentra el local, se les exige pasar un reconocimiento médico. No obstante ésas son precisamente, por su avanzada edad, las menos castigadas por el virus. Les afecta más la sífilis y la gonorrea.

Las más jóvenes, y en Centro las hay de hasta 13 años, son las más perjudicadas por la heroína y el virus, pero se resisten a ir al centro.

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Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

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