Un juez investiga la muerte de un preso en una celda de aislamiento de Carabanchel
El Juzgado de Instrucción número 10 de Madrid ha abierto diligencias para aclarar si hubo negligencia médica en el fallecimiento de un preso de Carabanchel que estuvo 37 horas en una celda de aislamiento con fuertes dolores abdominales.
Luisa González Silván, madre del interno fallecido, Francisco Menacho, de 33 años, asegura en la denuncia que su hijo murió como consecuencia de una perforación de duodeno sin recibir "una atención médica adecuada", ya que, según ella, los médicos no le reconocieron adecuadamente y, cuando lo hicieron, le suministraron una medicación que determinó su muerte.González afirma que su hijo fue conducido el 29 de agosto a los calabozos de los juzgados de la plaza de Catilla acusado de sustraer un bolso y que allí comenzó a sentir fuertes dolores de estómago, por lo que reclamó "insistentemente" un médico. "A tí lo que te pasa es que tienes mono", le espetó un funcionario, siempre según la versión de la madre, que indica: "Es imposible que tuviera mono, pues no era drogadicto". Este periódico intentó ayer conversar, sin éxito, con la dirección de la cárcel de Carabanchel. El mismo día 29, Menacho fue trasladado a Carabanchel, cuya Junta de Régimen Disciplinario decidió un día después sancionarle con siete días de aislamiento por "golpear insistentemente la puerta de la celda [de los juzgados]" para, según González, pedir un analgésico.
Luisa González visitó a su hijo en Carabanchel el día 30 y advirtió que estaba "desesperado" y reclamaba un médico: "Lo encontré en un estado lamentable, doblado por el dolor y lloraba; me dijo que no le enviaban al médico y que no podía más...".
La madre no entiende como el forense que lo atendió en el juzgado dijo, sin hacerle ningún tipo de exploración previa, que su hijo "no necesitaba ayuda alguna". Asegura que su hijo no habría muerto si lo hubieran operado. La dirección de la prisión de Carabanchel asegura en un oficio que el citado interno fue "visitado por un médico diariamente, sin que en ningún momento se observara anormalidad alguna que aconsejase la suspensión de su régimen de aislamiento".
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