Obiang promete que promulgará una amnistía e instaurará la democracia

El presidente de Guinea, Teodoro Obiang Nguema, se comprometió ante su huésped español, Felipe González, a instaurar el pluripartidismo y a promulgar una amnistía, y le pidió incluso que invite en su nombre a los exiliados políticos ecuatoguineanos en España para "que vuelvan al país para participar en el desarrollo democrático de la nación". Manifiestamente contenta por esta promesa del anfitrión, la ministra portavoz, Rosa Conde, no dudó en afirmar que, con motivo de la primera visita oficial de González a la ex colonia española, se ha producido "una inflexión en la relación relación hispano-guineana".

La ministra vaticinó que la cooperación con España será "más estable y fructífera" en el futuro. "Había una sombra entre nosotros, pero ahora se ha disipado", añadió. Obiang anunció esta apertura política en la conversación que mantuvo, el viernes por la noche, con el jefe del Gobierno y la reiteró en parte, ya en la madrugada del sábado, en el discurso que pronunció al término de la cena que ofreció a su huésped y a su séquito.Formuló primero sus "mejores votos" para el PSOE y el Gobierno español, y en tono cordial dijo de González que era "un hermano y amigo". Aseguró que, tras la llegada al poder del PSOE, la cooperación española "se ha hecho más racional y objetiva". Resaltó además que "para nosotros, Guinea Ecuatorial constituye una parte de España (...)".

El general que encabeza el régimen guineano justificó después la lentitud del proceso de democratización a causa del miedo, la pobreza, el atraso cultural, que constituyen "reminiscencias" de la dictadura de su tío, Francisco Macías. La crisis económica, añadió además, "dificultará el normal desarrollo democrático" y pidió el apoyo "solidario ( ... ) de los países amigos", es decir, un incremento de la cooperación que González vinculó con las reformas democráticas.

Veto a exiliados

Las promesas de Obiang contrastan con sus más recientes iniciativas. Sometió el domingo pasado a votación un referéndum constitucional que no introduce el multipartidismo, pero que sí consagra la inviolabilidad de su persona. Vetó también el regreso de varios exiliados, como el democristiano Severo Moto, que pretendían denunciar la arbitrariedad de la consulta.Aunque González se negó a repatriarlos a Guinea en su avión, Moto y el socialista Tomás Mecheba, obtuvieron un lote de consolación cuando fueron recibidos en Moncloa el lunes por un asesor del jefe del Gobierno español.

El propio González manifestó a Obiang su intención de mantener en breve algún contacto con la oposición exiliada, según reveló la ministra portavoz, Rosa Conde. A algunos miembros de la delegación, las intenciones proclamadas por Obiang les recuerdan los discursos que el general-presidente pronunció con motivo de las visitas que efectuaron a la ex colonia los Reyes y Leopoldo Calvo Sotelo, en los que su anfitrión dejaba entrever la próxima democratización de su régimen.

González empezó la jornada de ayer con un recorrido por la plantación de cacao de Sampaka, después ofreció una recepción a los cooperantes españoles y visitó a continuación la sede de la emisora África 2000, que transmite en castellano para este continente. La citada emisora cuenta con el apoyo técnico y profesional del Ente Público Radio Televisión Española.

Cooperación

El jefe del Gobierno alabó en un breve discurso los esfuerzos desarrollados por los cooperantes en los últimos años en la ex colonia. El encuentro con los cooperantes se celebró en el centro cultural hispano-guineano.A mediodía de ayer, Felipe González se trasladó a Bata, la capital continental de Guinea, donde visitó las instalaciones de una compañía forestal.

En el palacio de África mantuvo una segunda charla con el presidente de Guinea, Teodoro Obiang Ngema, que le ofreció después otra cena.