Tres militantes integristas, ahorcados en Túnez

Tres militantes integristas del partido ilegal En Nahda fueron ahorcados en la madrugada del pasado miércoles en la cárcel civil de la capital tunecina. La noticia fue acogida con frialdad por la población mientras el presidente de la república, Zin Ben Alí, anunciaba al país una reestructuración ministerial, la segunda en lo que va de año. En esta remodelación se ha marginado a los sectores progresistas y liberales y se han reforzado los sectores vinculados al Ejército. Entre los cambios más significativos se encuentra el cese de Habib Bulares, que desempeñaba la cartera de Defensa y que con anterioridad había sido el responsable de Exteriores durante la guerra del Golfo.La ejecución de los tres militantes integristas puede provocar una ola de violencia en las próximas horas, sobre todo entre los fieles que acudan a la plegaria semanal de las mezquitas, según se vaticina en círculos de la oposición.

Los tres militantes islámicos habían sido juzgados y condenados a muerte el pasado mes de junio por su participación en el asalto a la sede central del partido gubernamental RCD (Rassemblement Constitutionnel Democratique). En esta acción los tres ejecutados asesinaron a un anciano militante de la organización que custodiaba el edificio.

Horas antes de la ejecución de los tres militantes integristas, el primer ministro argelino Sid Ahmed Gozali, hizo un improvisado viaje a Túnez para entrevistarse con el presidente de la república y pedir el indulto de los tres condenados. En la entrevista que mantuvieron Gozali y Bien Alí los dos dignatarios trataron el tema de las actividades de los exilados de En Nahda en Argelia, y que viene provocando un conflicto diplomático entre ambos países.