La nueva ley del servicio militar permitirá a los políticos librarse de la 'mili'

El proyecto de ley del servicio militar, cuya admisión a trámite fue probada ayer por el pleno del Congreso, abre la puerta a la posibilidad de que los jóvenes encuadrados en partidos políticos que ocupan argos de elección popular en Cortes, asambleas autonómicas o ayuntamientos se libren de la mili sin realizar ningúna prestación sustitutoria, al contrario que los objetores

El portavoz del CDS, José Ramón Caso, advirtió ayer que el proyecto del Gobierno permite obtener indefinidamente sucesivas prórrogas por desempeño de cargo público, eliminando las limitaciones que existen en la legislación vigente.Fuentes del Ministerio de Defensa admitieron que si un joven continúa en un cargo de elección popular hasta cumplidos los 34 años quedará, exento del servicio militar, y señalaron que debe ser el Parlamento, a través de las enmiendas que se presenten, quien decida si entra en vigor este precepto. La prórroga por ostentar cargo público, al contrario de lo que el texto dispone con carácter general, puede obtenerse una vez agotadas otro tipo de prórrogas, como la de estudios.

"Este punto", subrayó Caso, "es aún más significativo por cuanto paralelamente se produce una reducción y endurecimiento drásticos de las prórrogas, exenciones y exclusiones para el resto de los ciudadanos cuya dedicación no es la política en los partidos. Se dificultan y se reducen los derechos a prórrogas por estudios, mantenimiento familiar, consolidación de puesto de trabajo, residencia en el extranjero, etcétera. Se prevén serias restricciones de las causas de exclusiones médicas y desaparecen exenciones totales a las que se tenía derecho por consecución de exenciones temporales sucesivas".

Otro punto del proyecto que fue criticado, tanto por el portavoz del CDS, como por el de Izquierda Unida, Antonio Romero, fue la obligación que tienen los soldados que cumplen el servicio militar de contribuir al "mantenimiento de la paz y seguridad internacionales", lo que da cobertura legal a su envío al extranjero, como sucedió con los marineros durante la guerra del Golfo.

El ministro de Defensa, Julián García Vargas, declaró al término del debate que "España deberá hacer frente a responsabilidades compartidas con otros socios en el marco de la Unión Política Europea" y que ello "hay que preveerlo en la ley". El ministro agregó que las fuerzas militares que España envíe en el futuro al extranjero estarán formadas prioritariamente por profesionales y, en muchos casos, tendrán carácter humanitario.

Enmiendas rechazadas

El pleno del Congreso rechazó, con los votos del, Grupo Socialista y la abstención del Popular, las enmiendas a la totalidad contra la ley del servicio militar presentadas por el PNV, CIU, CDS, IU, Eusko Alkartasuna, Euskadiko Ezkerra y el Partido Andalucista, que pedía la devolución del texto al Gobierno. Los defensores de las enmiendas coincidieron en criticar el mantenimiento del servicio militar obligatorio, previsto en el proyecto, y en reclamar la total profesionalización de las fuerzas armadas, basándose en el actual clima de distensión mundial.Algunos oradores añadieron a su discrepancia de fondo las críticas a aspectos concretos del proyecto, como el catalán Salvador Carreras, quien calificó de "tomadura de pelo" la denominada mili a la carta ya que, aunque los jóvenes podrán elegir el momento y el lugar en que se incorporan a filas, la última palabra la tiene el Ministerio de Defensa. Santiago López, portavoz del Grupo Popular, advirtió que, a pesar de que su partido no ha planteado enmienda a la totalidad de la ley por coincidir con el modelo de Ejército mixto que consagra, compuesto a partes iguales por profesionales y voluntarios, "esta ley no está consensuada y, o muchas cosas cambian, o no van a contar con nuestro voto a favor".

Tanto el portavoz socialista, Pedro Moya, como el ministro, Julián García Vargas, quien intervino al inicio del debate en defensa del proyecto de ley, se mostraron dispuestos a "mejorarlo" durante el trámite parlamentarío, aceptando enmiendas que presenten los partidos de oposición. Por otro lado, el Consejo de Ministros estudia hoy el real decreto que determinará el contingente de mozos que harán el servicio militar en 1992.