Gorbachov afirma que prefiere dimitir antes que ver rota a la URSS
El presidente soviético, Mijail Gorbachov, dijo ayer que prefiere dimitir antes que ver desde su puesto la desintegración de la Unión Soviética. El líder soviético repitió que debe firmarse un nuevo Tratado de la Unión entre las repúblicas. Es la segunda vez en un mes que Gorbachov amenaza con la dimisión. Mientras, las conversaciones entre las autoridades georgianas y la oposición se suspendieron después de que el domingo por la noche se produjera una fuerte explosión frente a la Radiotelevisión, actual sede de las fuerzas contrarias al presidente Zviad Gamsajurdia.
La explosión hirió a vanas personas que tuvieron que ser internadas en un hospital. Gamsajurdia negó que sus partidarios hubieran disparado el proyectil y dijo que se trataba de una provocación. Las reuniones mantenidas entre dirigentes opositores y el Gobierno el domingo ya habían desembocado en un atolladero, pues este último ponía como condición para seguir las negociaciones que la Guardia Nacional rebelde, comandada por Tenguiz Kitovani, depusiera las armas y se disolviera. Tenguiz Sigua, ex primer ministro de esta república transcaucásica y actual líder de la oposición, calificó de "inaceptable" esta exigencia argumentando que lo que el Gobierno perseguía en realidad era "desatar la represión" contra sus adversarios políticos.Ayer, ambos bandos organizaron sendos mítines en defensa de sus reivindicaciones. La oposición pide la liberación de los presos políticos, libertad de prensa, la dimisión de Gamsajurdia, la renuncia al sistema presidencial y la convocatoria de elecciones parlamentarias anticipadas.
Gamsajurdia, por su parte, exige a sus contrarios que entreguen todas las armas y les promete a cambio que no serán perseguidos. Numerosos georgianos de provincias han llegado a Tbilisi atendiendo su llamamiento de acudir a defender "al presidente y al Parlamento democráticamente elegidos".
Mientras tanto, en Moldavía, una delegación del Parlamento ruso ha hecho de mediadora en Dubassari entre los partidarios del Gobierno nacionalista de Kishiniov y los rusoparlantes de la autoproclamada República del Dniéster, o Trarisdriéster, para conseguir la evacuación de las fuerzas de ambos bandos, que llegaron sin parar a la ciudad desde que, en la madrugada del miércoles, se produjeron tiroteos que dejaron a tres personas heridas.
De las otras ciudades de la República del Dniéster llegaron a Dubassari destacamentos de voluntarios obreros, mientras que de Kishimov acudieron voluntarios del Frente Popular y comandos especiales de la policía.
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