El juez investiga el diálogo entre el 'comando Donosti' y los guardias civiles

El juez Fernando Andreu Merelles, instructor de la causa que se sigue para esclarecer la muerte de los etarras Iñaki Ormaetxea, Jokin Leunda y Patxi Itziar en un enfrentamiento con la Guardia Cisal, el 17 de agosto en San Sebastián, tomó ayer declaración a tres vecinos del barrio en el que sucedieron los hechos.Los testimonios se centraron en las horas en que se produjeron los disparos, tanto los efectuados por agentes de las fuerzas de seguridad del Estado como los que realizaron los tres integrantes del comando Donosti, y en las frases que se cruzaron a lo largo de cuatro horas unos y otros.

A primeros de octubre prestará declaración María Eugenia Muñagorri, propietaria del piso en el que se encontraban alojados los tres terroristas.

Una vez que se efectúe esa prueba testifical, el juez citará para recibir testimonio a los mandos que dirigieron la operación que posibilitó la desarticulación del comando Donosti y a los agentes de la Guardia Civil que entraron en el inmueble en el que estaban apostados los tres activistas de ETA.

La muerte de los terroristas ha impedido a los servicios de información de las fuerzas de seguridad del Estado en Guipúzcoa desmantelar la infraestructura que ese grupo terrorista poseía en la zona.