El Congreso rechaza el modelo de banca pública pedido por el Partido Popular

El pleno del Congreso de los Diputados rechazó ayer el modelo de banca pública que ha propuesto el Partido Popular como alternativa a lo que ha puesto en marcha el Gobierno y que se ha traducido en la formación de la Corporación Bancaria de España (CBE). El modelo de banca pública que propuso ayer el diputado José Manuel García-Margallo (mediante una enmienda a la totalidad del proyecto de ley sobre organización de las entidades de crédito de capital público) propugnaba la desaparición del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD).La propuesta de García Margallo, que sólo contó con el apoyo del Grupo Parlamentario Popular, pedía la configuración de una sola entidad en el marco de la CBE y su sometimiento a las leyes que rigen para la banca privada. Asimismo, que se eliminen los canales de financiación privilegiada de la banca pública tales cono las cédulas de inversión, según el diputado.

El Grupo Popular propugna un modelo que concede otro grado de supervisión del Banco de España. "Desde luego, si algún día gobernamos cambiaremos el grado de supervisión del Banco de España sobre la banca pública para que se haga con mayor independencia", recalcó García Margallo.

También criticó el actual procedimiento de concesión de beneficios fiscales para las fusiones bancarias y acusó al Gobierno de ser el dueño e inspirador de estas fusiones porque con las exenciones fiscales de algún modo dirige las fusiones que quieren que se hagan y cuales no." El PP en su propuesta pidió que cualquier posible privatización bancaria se haga por ley para que se evite que se realice a espaldas del Parlamento. Izquierda Unida apoyó esta petición. No obstante el representante de este grupo, Ramón España, calificó de sarcasmo que el representante de la derecha económica pida la desaparición del Fondo de Garantía de Depósitos cuando se trata de un organismo que ha servido para reflotar bancos privados. El grupo vasco rechazó también la pro -puesta del PP por entender que busca la centralización sin sensibilidad autonómica.