Los promotores privados de viviendas tendrán idénticas ayudas que los públicos

El plan de vivienda que ultima el Gobierno incluirá una equiparación de los promotores públicos y los privados a la hora de recibir ayudas oficiales, según fuentes del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT). Por otra parte, el departamento que dirige José Borrell acaba de redactar un decreto sobre financiación para la compra y urbanización del suelo que contempla una subsidiación sobre los tipos de interés de seis puntos.

Los responsables del área de vivienda de las distintas comunidades autómomas y de la Administración central mantuvieron el pasado lunes una reunión en la que se esbozaron las primeras conclusiones de lo que va a ser el Plan 460.000.Entre esas conclusiones destaca que todas las modalidades de subvención destinadas a la construcción o rehabilitación de viviendas podrán ser recibidas en las mismas condiciones por los promotores privados y los públicos.

Hasta el momento, la diferencia básica radicaba en las ayudas destinadas a la construcción de viviendas protegidas en régimen especial. Este tipo de construcciones estaba reservado a los promotores públicos que gozaban de la ventaja de obtener el suelo gratis. Precisamente este coste cero es una de las tradicionales críticas de los promotores privados a la Administración.

Fuentes tanto del MOPT como de diversas comunidades autónomas coinciden en señaalar "que esta medida tiene como objetivo incentivar la oferta en lugar de la demanda. Si todo se centrara en el fortalecimiento de la demanda correríamos el riesgo de desbordar los precios".

Otro de los aspectos del Plan 460.000 en el que parece haber acuerdo es en la fórmula de financiar la compra y urbanización del suelo. El borrador del decreto que detallará esta fórmula recoge una subsidiacación sobre los tipos de interés de seis puntos. En la actualidad, el tipo de convenio entre la Administración y las entidades bancarias está en el 13%, con lo que los créditos quedarían fijados en el 7%. Dicho decreto fijará un férreo control sobre la forma de conceder las subvenciones.

Cada operación subsidiada tendrá que ser seleccionada por la comunidad autónoma correspondiente, en función de las características de los proyectos propuestos. El borrador contempla que los que se desarrollen en los núcleos urbanos o sus proximidades serán prioritarios. Además, todos los programas subsidiados tendrán una vigilancia especial a través de una comisión de seguimiento mixta entre la Adnmisnitración central y la comunidad correspondiente.