El Parlamento argelino vota hoy el programa del primer ministro Gozali
La Asamblea Popular Nacional argelina se reunirá hoy para votar, y con toda seguridad aprobar por amplia mayoría, el programa de Gobierno del primer ministro, Sid Ahmed Gozali, que contiene una propuesta de reforma, aún no especificada, de ley electoral. El programa empezó a discutirse en la Asamblea el miércoles, y los trabajos de discusión finalizaron el domingo.
Una parte central del programa de Gobierno se centra en su voluntad de organizar en "condiciones impecables" y de "total sinceridad" las elecciones legislativas suspendidas el pasado 27 de junio. Pero, previamente, prometió ciertos "ajustes legislativos".Gozali ha prometido una reforma económica que, sin rechazar el proceso de cambios que posibilitan la entrada de Argelia en la economía de libre mercado, es una vuelta atrás en los esquemas económicos de los años setenta con un nuevo impulso a la empresa estatal.
El domingo por la tarde la policía detuvo en la alcaldía de Kuba, al este de Argel, al portavoz oficial del Frente Islámico de Salvación (FIS) y número cuatro de la organización, Mohamed Said. Ha tomado el relevo en la dirección del partido Hachemi Sahnuni, el imam ciego de Belcurt, cuyo primer acto fue enviar una carta en tono amenazador al presidente Benyedid pidiendo la libertad de todos los detenidos. Said asegura que si los integristas arrestados no son liberados habrá una nueva explosión de cólera, "cuyas consecuencias sólo Dios las sabe". Los imames de las mezquitas leyeron la carta desde sus minaretes el mismo domingo por la noche, una hora antes de que se iniciara el toque de queda. Pero las amenazas no parecen preocupar al Gobierno, que en la madrugada del domingo al lunes retiró algunos de los carros de combate que aún permanecían apostados en el centro de Argel.
[Los ministros de Economía y Finanzas de la CE aprobaron ayer la concesión de préstamos a Argelia por un máximo de 65.000 millones de pesetas, que se añadirá a la ayuda del FMI y a los aplazamientos de pagos a negociar con los bancos acreedores, informa Félix Monteira.]
