_
_
_
_
LA DESINTEGRACIÓN YUGOSLAVA

La CE suspende la ayuda económica a Yugoslavia y decreta un embargo de venta de armas

ENVIADOS ESPECIALESLa Comunidad Europea (CE) decidió ayer en La Haya suspender la ayuda financiera a Yugoslavia como arma de presión para forzar a una solución pacífica. "Sabemos que el apoyo económico es indispensable para la supervivencia y el desarrollo del país", manifestó el ministro holandés Hans van den Broek al término de la reunión extraordinaria de los ministros de Asuntos Exteriores de la CE. Los Doce decretaron un embargo total de las ventas de armas, al que invitan a sumarse a otros países. El comunicado final de ayer, por primera vez, no menciona de forma expresa el respeto a la integridad territorial de Yugoslavia, pero tampoco el derecho a la autodeterminación de las repúblicas.

Más información
Bruselas envía dos misiones para negociar la crisis

Las diferencias de criterio entre los Doce se saldaron con la referencia a "los principios del Acta Final de Helsinki y de la Carta de París para una nueva Europa" que engloba ésos y otros derechos. La fórmula representa un freno a las pretensiones de Alemania.El ministro alemán Hans Dietrich-Genscher había anunciado que en el comunicado final figuraría "el reconocimiento de la independencia de Eslovenia y Croacia si el Ejército federal volvía a intervenir". "El resultado es que esa posición no se menciona en el texto", señaló Francisco Fernández Ordóñez, quien no quiso entrar en detalles, dijo, porque "defiendo lealmente la CE y su imagen exterior".

El francés Roland Dumas sí fue más explícito al afirmar que "determinados mensajes pueden contribuir a crear más tensión". El reconocimiento de la indepen dencia, añadió, "podría tener efectos sobre el mapa de Europa y vincular a la CE para el futuro". El frente formado por Francia, España y el Reino Unido se impuso al que encabezaba Alemania, con el apoyo de Dinamarca y Bélgica. "La CE sigue que las fronteras son inviolables para no crear un foco de inestabilidad en Europa", explicó Fernández Ordóñez. El ministro español, perfec tamente asesorado por el presidente Felipe González, vino a la reunión con el objetivo de impedir que prosperase un precedente que un día pudiera ser esgrimido por el País Vasco o Cataluña.

Renuncia de Genschet

Genscher renunció a su "arma de presión" porque algunos colegas, entre ellos el griego Antonis Samaras, le hicieron ver que, en lugar de instrumento disuasorio, la amenaza podría actuar de estímulo al enfrentamiento. Tampoco ninguno de los Doce era ca paz de predecir qué pasaría en la hipótesis de una guerra civil convertida por el reconocimiento de Eslovenla y Croacia en conflicto internacional.

Los Doce decidieron enviar a la troika comunitaria, formada por los ministros de Exteriores de Holanda, Luxemburgo y Portugal, además del comisario Abel Matutes, para intermediar en el conflicto por tercera vez en una semana. Ahora acude a petición de Yugoslavia con la Idea de hacer funcionar un acuerdo impulsado por la CE, que "no ha funcionado", como señaló Fernández Ordóñez. Ni el alto el fuego total ni la suspensión temporal de la independencia se han puesto en vigor.

Los ministros de Exteriores volverán a reconsiderar el próximo miércoles en La Haya las medidas a tomar en caso de que la solución pacífica no se imponga. Los Doce están de acuerdo en que "es a los pueblos yugoslavos a los que corresponde decidir su futuro", pero a la vez reconocen que ,se ha producido una nueva situación" en la que el orden constitucional, como mínimo, debe cambiarse.

Desarrollo de negociaciones

Para la CE, "la presidencia federal debe ser capaz de desarrollar a fondo su papel en las negociaciones sobre el futuro de Yugoslavia, pero no podrá hacerlo si no ejerce un control total, político y constitucional, sobre el Ejército". Lo que ha sucedido en Yugoslavia, según Jacques Delors, es que "se han desbordado las pasiones, y su resultado nos afecta a todos". Por eso hay que evitar "una guerra de consecuencias incalculables para Europa".

Para ayudar a apaciguar la tensión, la CE embarga las ventas de armas y suspende la ayuda económica, aunque las ventajas comerciales a Yugoslavia se mantienen de momento.

La medida se concreta en la congelación de los 6.500 millones de pesetas en créditos que faltan por otorgar del segundo protocolo financiero en vigor. Con respecto al tercer protocolo firmado el pasado día 24, en el que se prevén créditos bonificados por valor de 105.000 millones de pesetas en los próximos cinco años, la decisión es paralizar su tramitación hasta que no haya un acuerdo negociado.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_