López Blanco, ex delegado de Trabajo en Baleares, aparece vinculado al grupo empresarial de Filesa

ANDREU MANRESA Javier López Blanco, director provincial del Ministerio de Trabajo en Baleares desde febrero de 1983 hasta octubre de 1987, está vinculado profesionalmente a Viajes Ceres, la empresa que obtuvo la concesión de los viajes subvencionados por el Inserso para la tercera edad. Ceres, a su vez, está vinculada a Time Export y Filesa, las sociedades relacionadas con la supuesta financiación irregular del PSOE. López Blanco es también vocal del consejo de administración de otra empresa participada por Filesa: Desarrollos Deportivos y Comerciales Internacionales, SA.

Este ex funcionario es también administrador de Tornasol Films. En documentos contables, López Blanco es citado también como administrador de Trade Managers y Omni Video, participadas por Filesa, pero él niega este extremo. Cuando desempeñaba aquel cargo público, López Blanco participó directamente, junto a dirigentes del PSOE y de UGT, en el diseño de las campañas de viajes para jubilados que patrocina el Inserso, dependiente entonces del Ministerio de Trabajo, y desde julio de 1989, del Ministerio de Asuntos Sociales de Matilde Fernández. López Blanco formó parte de la comisión de contratación que en 1987 adjudicó el primer programa del Inserso a Invierno Balear, en la que ya estaba presente su socio y amigo Juan Bautista Calatayud, actual administrador único de Ceres. Ninguno de ellos es militante del PSOE ni de UGT.

Desde noviembre de 1988, López Blanco figura como consejero de Desarrollos Deportivos, junto a Luis Oliveró, el mismo que coordinó desde Filesa y Time Export, junto al diputado socialista por Barcelona Carlos Navarro, el entramado empresarial presuntamente relacionado con el PSOE. En la actualidad, López Blanco sigue colaborando con Viajes Ceres, concesionaria de las vacaciones para jubilados hasta 1990 y que fue beneficiaria de más de 10.000 millones de pesetas de subvención por parte del Inserso. Ceres presentó suspensión de pagos a finales de 1990, con un pasivo de 2.100 millones de pesetas. Los portavoces de los hoteleros de Balea res que se han quedado sin cobrar por la suspensión de pagos han señalado el papel relevante del antiguo director provincial de Trabajo en la complicada red tejida alrededor de Viajes Ceres. Dirigentes de UGT reconocen haberse entrevistado con López Blanco y Elvira Cortajarena, que fue subdirectora general de gestión del Inserso, para impulsar los viajes dejubilados en los meses de escasa actividad turística.

Las mismas fuentes revelaron que inicialmente se pensó en la constitución de un operador ligado directamente a la central sindical para que gestionase el programa y ayudara a sus propias finanzas. Descartada esta opción, se impulsó Viajes Ceres, desde el PSOE y UGT, a partir de Paulino Barrabés, hoy en la dirección de la cooperativa ugetista PSV.

Con anterioridad a la presentación de la suspensión de pagos de Viajes Ceres, en septiembre de 1990, López Blanco se dirigió a la empresa pública Enatcar ofreciéndole el 10% de las acciones de la participación controlada por UGT. Según fuentes conocedoras de aquella operación, Enatcar rechazó la oferta. Según esta versión, UGT quería vender una parte de sus acciones en Ceres porque necesitaba liquidez.

Accionariado

Sin embargo, entre la documentación que obra en poder de este diario, procedente de los archivos de Filesa, Malesa y Time Export, que facilitó el contable Carlos Alberto van Schouwen, queda identificada la composición del accionarlado y se atribuye el 10% de la propiedad de Ceres a Enatcar, empresa pública dependiente del Ministerio de Transportes (hoy, Ministerio de Obras Públicas y Transportes). Enatcar figura como acreedora de Ceres (por más de 300 millones), pues era quien se encargaba en la Península del transporte por carretera de los jubilados.

Otro de los episodios sobre el que los acreedores han centrado su interés es la reclamación judicial de cantidad que Enatear presentó contra Viajes Ceres durante el pasado verano. Esa empresa pública anunció que iba a instar la declaración de quiebra de Viajes Ceres, lo que hubiera dificultado enormemente el cobro de las deudas pendientes, pero la agencia de viajes se adelantó y presentó al juzgado la suspensión de pagos.