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Los empleados del Metro convocan una huelga parcial de hoy al día 21 sin servicios mínimos

Francisco Peregil

La asamblea de trabajadores de Metro de Madrid aprobó ayer por 256 votos a favor, 12 en contra y 25 abstenciones la convocatoria de paros intermitentes durante los días laborables comprendidos entre hoy y el 21 de junio. Los paros que afectan a los viajeros se efectuarán de siete a nueve de la mañana y de cinco a siete de la tarde. La asamblea decidió también incumplir los servicios mínimos fijados por la empresa (un 60% por la mañana y un 50% por la tarde). Al cierre de esta edición, sindicatos y empresa discutían para tratar de desconvocar la huelga. Sólo había acuerdo en un punto.

Dos son las razones que aducen los trabajadores para iniciar la huelga: "Erradicar las coacciones de la empresa cuando los empleados se dan baja por indisposición y otro, menos importante, el cobro de una tasa por nocturnidad superior a la que abona la compañía".El director de Metro, Guillermo Vázquez, calificó de irrelevantes los dos motivos dado que, en el caso de las indisposiciones, sólo se ha penalizado en los dos últimos meses a cuatro trabajadores con diez días de suspensión de empleo y sueldo. "Esto significa que ha afectado al uno por mil de los 6.000 trabajadores de Metro".

Sobre la tasa de nocturnidad, Vázquez dijo que la tesis del comité de huelga suponía una subida de 130 millones anuales sobre los 300 que actualmente se pagan por este concepto. "Es algo que se puede negociar y que no debe llevar nunca a una huelga", añadió.

La guerra de las 'papelas'

Tanto la dirección como el comité de empresa han convenido en que el principal punto es el de las indisposiciones, que en Metro se conocen como papelas. En la actualidad, los empleados de la compañia tienen derecho a 11 días de baja por enfermedad durante el año, de los cuales los cinco primeros son remunerados por Metro.Manuel Fernández, portavoz del comité de empresa, explica: "La empresa nos envía un inspector durante los cinco días remunerables, lo cual no deja de ser una forma de coaccionar. Además, nosotros podemos aducir baja temporal durante el momento previo al inicio del trabajo, según recoge nuestro estatuto. Esto significa que si a mí me da un dolor a las seis de la mañana que es cuando empiezo a trabajar, cuatro horas más tarde puedo estar donde me plazca, sin que el inspector que mandan a casa tenga que abrir un expediente.

La empresa incició en 1989 un plan contra el absentismo, con la contratación de un equipo médico, que ha provocado el despido de 34 trabajadores. En 1989 el porcentaje de asentismo por enfermedad común en el metro fue del 6,80% y del 5,61 en 1990.

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Guillermo Vázquez ha informado que en los dos últimos meses se han cursado cerca de 3.000 indisposiciones. De forma aleatoria, este año se realizaron 152 inspecciones médicas, de las cuales 98 fueron correctas y por otras 54 se ha abierto expediente. De estos, 27 están por concluir, 15 se han sobreseido, siete han dado lugar a amonestaciones y cuatro han provocado suspensiones de empleo y sueldo. Los sindicatos exigen que estos expedientes queden anulados. Precisamente el único punto en el que se había alcanzado un acuerdo en la reunión de esta madrugada era la retirada de los expedientes incoados, salvo uno, pactado entre ambas partes.

Mientras, los bomberos de la Comunidad, que cumplen hoy su cuarta jornada de huelga de celo, se reunirán esta semana con los grupos parlamentarios para exponerles su reivindicación de equipara salarial con los empleados públicos, informa Efe.

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Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

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