Fuerzas de reacción rápida reforzarán la nueva estructura de la OTAN

Cuatro divisiones de carácter multinacional y bajo mando británico constituirán las fuerzas de reacción rápida de la OTAN (que supondrán el 7% del total de efectivos de la Alianza), según el acuerdo alcanzado ayer en Bruselas por los ministros de Defensa de la OTAN. España participará en la división que defenderá el flanco sur, aunque "la contribución se mantendrá siempre dentro de la modalidad española de adhesión a la OTAN", señaló Julián García Vargas.

Las condiciones de adhesión a la OTAN significan, según el ministro, que el mando permanezca en manos españolas y no exista automatismo en la cesión de unidades para las misiones requeridas. "En un momento dado", precisó, "podrá ser necesario que tropas españolas se desplacen a otro país de la OTAN o que tropas aliadas lo hagan a nuestro país". García Vargas indicó que está nueva estrategia no se podrá poner en práctica antes de 1993 y que la participación española se produciría "sin estar en el mando integrado", lo que se resolvería mediante la cesión pactada del "control operativo" de cada misión. El acuerdo entre los aliados para la nueva estructura militar, que conjugará una capacidad de respuesta más flexible y eficaz con la reducción de efectivos, es completo en cuanto a la reestructuración del Ejército de Tierra. El papel de la Marina y de la Fuerza Aérea está sometido a las precisiones que aporte el mando supremo de la OTAN (Saceur).En el nuevo esquema, la OTAN contará con:

1. Fuerzas de defensa principal: siete cuerpos de ejército en Centroeuropa, seis de ellos de carácter multinacional, y uno, alemán por entero, a instalar en territorio de Alemania del Este a partir de 1994, ya completada la retirada de fuerzas soviéticas.

2. A este bastión defensivo, ante la tradicional amenaza de la URSS, se añaden las fuerzas de refuerzo que se pueden movilizar en caso de crisis.

3. El tercer pilar del sistema defensivo aliado lo constituirá la novedad de las fuerzas, de intervención rápida, entre 70.000 y 100.000 hombres, agrupados en cuatro divisiones. Dos de estas divisiones serán británicas (una de ellas, de carros de combate pesados, está actualmente basada en Alemania, y la otra, acorazada ligera, en el Reino Unido). Una tercera división estará integrada por soldados alemanes, belgas, holandeses y británicos. Se creará también una cuarta división para reforzar el flanco sur, en la que "participará España", según declaró el ministro alemán de Defensa y presidente del eurogrupo, Gerhard Stoltemberg.

Fuentes españolas insistieron en que "esta nueva división está por definir", y sobre su composición final existen dudas. Además de Italia y España, quieren participar Grecia y Turquía. Francia no lo hará.

García Vargas precisó que España decidirá su participación "en función de cómo vayan a funcionar estas fuerzas, dentro de los acuerdos de coordinación. De los seis acuerdos que definen nuestra participación militar en la OTAN están ya asumidos cuatro, y faltan por negocian el de vigilancia y control del estrecho de Gibraltar y el de uso de nuestro territorio como retaguardia y apoyo logístico. Las seis funciones básicas de España responden a la concepción del enemigo soviético, teoría hoy parcialmente superada por las fuerzas de reacción rápida, que responderán ante cualquier crisis.

El secretario de Defensa norteamericano, Dick Cheney, reafirmó la oposición de su país a cualquier diseño de defensa europea (dentro del ámbito de la CE) que suponga una debilitación de la prioridad de la OTAN. La versión sólo europea de las fuerzas de reacción ráplida de la OTAN será útil para determinadas intervenciones fuera de zona.

La remodelación de la estructura defensiva viene apuesta por los acuerdos de reducción de armamento y el fin de la guerra fría, pero "los dividendos de la paz", según fuentes de la OTAN, no se traducirán a corto plazo en ahorros de presupuesto.