El fracaso de la cultura de la paz
Alrededor de 1880 se produjo un cambio muy importante en la historia del mundo, se pasaba a un nuevo orden internacional, entrábamos en la era industrial. Ahora, 100 años más tarde, todo parece -o parecía- indicar que vamos a entrar en otro nuevo orden, superior al anterior, donde se tiende a un mayor equilibrio e igualdad y a un establecimiento de la cultura o la lógica de la paz; es la era de la tecnología avanzada, del control, de las telecomunicaciones... es la era del 2000.Desde hace aproximadamente dos años, cuando hechos tan significativos como la caída del muro de Berlín, la liberación de Mandela o la destrucción de armas por parte de las potencias militares parecen simbolizar un cómodo y perfecto cambio a la nueva era, surge un hecho fortuito, la invasión de Kuwait y que solamente por salvar la hegemonía y el poderío de un país no se ha resuelto de la forma deseada'
Lo que quiero decir es que si se hubiera optado por una forma pacífica para la resolución del problema de Kuwait, no sólo se hubiera podido sumar a los hechos anteriormente citados como significativos para el cambio de una era, sino que además hubiera servido de paradigma de cómo un problema tan grave como la pérdida de soberanía de un país por invasión de otro se puede resolver sin derramar una gota de sangre, y, lo que es más importante, sin recurrir al uso de la fuerza y las armas, y demostrar y convencer a un mundo más atrasado de la racionalidad del mundo occidental. Así no sólo se ha retrasado y alterado el cambio a una nueva era, siempre mejor, sino que además se ha impuesto la tradicional cultura de la guerra, ha dado un paso atrás el hombre racional. Los que defendíamos la lógica o cultura de la paz como medio para obtener un fin hemos perdido.-
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