Varias obras simultáneas causan el caos circulatorio en Aranjuez

La puesta en marcha, este fin de semana, del plan de circulación alternativo, realizado por el Gobierno municipal con motivo de las numerosas obras que se están acometiendo desde este mes, ha dado lugar a las primeras situaciones de caos circulatorio, al afectar dichas obras directa o indirectamente a cerca de un 75% de las vías circulatorias de la localidad.El despiste ha sido la norma común de estos primeros días. Conductores perdidos buscando una salida posible ante los numerosos cortes por obras y desvíos, vehículos en dirección contraria por calles cuya senalización ha cambiado en unos días y atascos continuos han sido la nota predominante, de lo que en principio será una situación que durará más de seis meses.

El Ayuntamiento se ha visto obligado a poner en funcionamiento un teléfono las 24 horas del día, el 892 08 21, para informar a los conductores, y ha buzoneado miles de cartas explicando el motivo de las obras y las vías alternativas. Medidas todas ellas poco habituales en una ciudad tranquila, poco acostumbrada a los excesos del tráfico rodado en sus calles.

Planes retrasados

Las obras que se están acometiendo son todas de gran envergadura y estaban previstas al comienzo de esta legislatura, perteneclendo la mayoría de ellas al llamado plan de revItalIzación. Los retrasos sufridos han hecho que todas ellas coincidan estos próximos meses.Las obras previstas son la entrada a Aranjuez por el puente de Barcas, donde la Comunidad ha invertido 150 millones de pesetas en la creación de una rotonda de regulación del tráfico en la zona de más tránsito y más estrecha de Aranjuez. A ello hay que unir otra obra de la Comunidad de Madrid que va a transformar la travesía de la N-IV en una avenida arbolada.

A los problemas en el eje Norte-Sur se unen los del eje Este-Oeste, con las obras que el MOPU está realizando para la construcción de una vía rápida que una un extremo y otro de la población con el nudo de la variante y evite el tráfico rodado por el casco urbano.

El Ayuntamiento lleva una semana señalizando calles, principalmente la de Stuart, núcleo comercial de Aranjuez, que desemboca en la plaza de la Constitución, y cuyas obras también han comenzado esta semana. Obras, por otra parte, muy polémicas, ya que no cuentan con el visto bueno ni de la oposición ni de los ecologistas, al tener que cortarse cerca de un centenar de árboles. El presupuesto es de 150 millones de pesetas.

Para el PP, estas obras y el plan alternativo, más que ayudar, aumentarán el caos.