Ikak prepara a su pueblo para la batalla final
Aparentemente descartada la posibilidad de una solución negociada, el Gobierno de Irak prepara a su pueblo para la batalla terrestre, en la que decenas de miles de hombres dejarán sus vidas. Desde el momento en que se conoció el desinterés del presidente norteamericano, George Bush, por la propuesta de paz de la Unión Soviética, Radio Bagdad no ha dejado de anunciar la inminencia del combate y de denunciar "la falsedad" del anunciado propósito de la coalición multinacional de liberar Kuwait. "No vienen con sus tropas y sus barcos a liberar a nadie, vienen a destruir a Irak, a los árabes y a los musulmanes", dijo ayer la emisora oficial iraquí, que por la noche anunció que el ministro de Asuntos Exteriores, Tarek Aziz, viajaría "pronto" a Moscú con la respuesta al plan soviético, decidida tras una reunión, del Consejo de Mando de la Revolución, presidido por Sadam Husein.
En París, el presidente François Mitterrand pidió ayer a Bush que no precipite los acontecimientos. Mitterrand recibió al ministro iraní de Asuntos Exteriores, Alí Akbar Velayati. "Desde ahora hay que prepararse para la idea de que Irán desempeñará un papel importante en la resolución final de las crisis del Golfo", explicó el ministro de Exteriores francés, Roland Dumas.Hasta anoche, Radio Bagdad sólo había hecho una mención indirecta a que EE UU y sus aliados habían rechazado "todos los intentos pacíficos y honestos presentados hasta el momento".
Radio Bagdad advirtió que las fuerzas multinacionales se encontrarán en su ofensiva terrestre con "sorpresas"que compensarán todo el poderío militar occidental, y añadió que si la potencia de las armas no es suficiente los soldados iraquíes dispondrán de la ayuda de Dios. "Lo Único que tenemos que hacer en estos momentos es seguir el Corán, luchar como un sólo hombre", dijo el locutor.
Muestra de prudencia
Los observadores interpretan el retraso de la respuesta iraquí a la oferta soviética como una muestra de prudencia ante una decisión que podría ser la última oportunidad de evitar la carnicería de una guerra por tierra.
Irak ha dado un gran paso adelante en el terreno diplomático al conseguir implicar a la Unión Soviética en la crisis, y no quiere ahora contestar con un desaire a la iniciativa de Moscú, por lo que sería previsible una respuesta positiva. Pero al mismo tiempo el Gobierno iraquí no parece dispuesto a anunciar nuevas concesiones cuando el otro bando ya las ha rechazado.
Un grupo de altos oficiales del Ejército soviético llegó el martes a Bagdad, según la radio iraquí, para intercambiar puntos de vista sobre la gran batalla, sin precisar los detalles de la misión.
La iniciativa de paz de Gorbachov ha provocado una profunda turbación en Francia. A diferencia de Washington Londres, París no rechazó de antemano el plan soviético y anunció que prefería conceder a Sadam "la última palabra". Ayer el ministro de Asuntos Exteriores, Roland Dumas, proclamó que Irak debería notificar sus intenciones respecto a Kuwait "en las próximas horas". La posición iraquí, precisó Dumas, tendría que ser expresada "claramente", sin ambigüedades". Era un modo de decir que Francia podía aceptar el plan de paz soviético si Sadam lo hacia previamente.
Pese a compartir con Bush y Major una profunda desconfianza y una gran aversión respecto a Sadam, Mitterrand ha creído que no podía arrojarse a la basura la propuesta de Gorbachov. El presidente francés sigue creyendo en la necesidad de ayudar al soviético a resolver sus problemas y estima que la posición de Gorbachov en la crisis del Golfo ha sido "irreprochable".
Además, el plan soviético no está lejos del que los franceses intentaron hacer aprobar sin éxito por el Consejo de Seguridad de la ONU el pasado 15 de enero.
[El líder libio Muamar Gadafi anunció ayer que ordenará a todas las fuerzas revolucionarias islámicas que ataquen intereses de EE UU si la guerra se convierte en "venganza. y agresión", informa France Presse].
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