Víctimas de violación

Soy una de tantas víctimas de violación. Aparte de haber sufrido tal humillación e impotencia por el acto de la violación, tienes que volver a pasarlo cuando vas a denunciarlo.1. En las comisarías no tienen un médico de guardia y, por tanto, tienes que ir a un hospital que te quiera atender, y esperar como cualquier persona que recurra al servicio de urgencias. Por tanto, pueden pasar varias horas (yo fui violada a las 13.30; el reconocimiento me lo hicieron a las 18.30, y la denuncia fue cursada a las nueve de la noche).

2. Cuando el médico te atiende (en mi caso, y por lo que leo en EL PAÍS del día 11 de febrero, en muchos más), parece que vas allí a tratarte un catarro.3. Y por último, los términos utilizados son una vergüenza. ¿Cómo pueden decirme que no he sido violada porque el violador no ha eyaculado en la vagina?

¿Cómo pueden decirme que no existe violencia cuando he sido forzada y atada? Todo esto fue en el hospital, pues éstos son los términos que el médico puso en su informe: "Intento de violación y ausencia de violencia" (palabras textuales). ¿Es que hace falta llegar desgarrada y ensangrentada para que exista violación y violencia?

Con esta carta quiero ofrecer mi solidaridad con las miles de mujeres, que estamos sufriendo estos casos y estas situaciones propias de gentes y de leyes sin sentimientos.-