"Van a pagarlo muy caro"

Maradona respondió ayer en su artículo semanal que publica el diario napolitano Roma. Sin negar nada de lo que se le acusa, se limita a uno de sus clásicos subterfugios: atacar y amenazar. Dice que ya se esperaba esta "ruin persecución" porque las cosas en el equipo "empezaban a ir un poco mejor". Afirma que ha pedido a sus abogados que vayan a fondo en las querellas contra sus acusadores y que todo el dinero que les va a sacar lo entregará para los niños pobres de Nápoles.Y amenaza también con irse definitivamente con su familia a Jamaica o a Cuba. "Estoy muy amargado", dice. Y aña de: "Me dan ganas de abando narlo todo, porque te falta el estímulo para rendir en el juego". Lo afirma como diciendo que "si el mister, es decir el entrenador, quiere que rinda que se las arregle ahora para que me dejen en paz". E insiste en que esta persecución se irá haciendo cada día más intensa en los tres meses y pico que le quedan para el final de la Liga. "Me espero de todo", dice., ante posibles revelaciones.

Maradona, que ve hecha añicos su imagen de santo, lanza una última amenaza afirmando que existe una gran responsabilidad en quienes `escriben ciertas cosas sin antes preguntar si pueden hacerlo" y que por tanto, añade, "deberán pagarlo muy caro".

No fue ayer la primera vez que Maradona lanza amenazas a través de dicha columna, o que responde a las acusaciones con un rosario de querellas.

Otros juicios

El jugador se encuentra así ante otro capítulo de un ya largo relato de incidentes, en los que los expedientes se agolpan en algunos tribunales. Las demandas contra Maradona son muy variadas y van desde una acusación sobre una cuestión de paternidad, a una investigación fiscal sobre los ingresos de la sociedad Maradona Productions, pasando por múltiples acusaciones del Nápoles sobre sus presuntos incumplimientos de contrato. La más llamativa de tales denuncias, antes de conocerse las implicaciones de este nuevo escándalo, es la relativa a una reclamación de paternidad de parte de Cristiana Sinagra, que asegura que Maradona es el padre de su hijo de cinco años. El miércoles se celebró la primera vista del juicio en Nápoles, al ser citada a declarar la hermana del jugador, que finalmente no asistió.Todo ello convierte a Maradona en un personaje especialmente crítícado en Italia. A finales de 1990, el diario La Repubblica efectuó una encuesta entre los italianos, cuyo resultado proclamaba a Maradona como el hombre más odiado de Italia, con el 34% de los votos. Maradona estaba por encima, en aquellos momentos, del mismísimo Sadam Husein, que no superó el 25% de los votos.