Emoción en la despedida de la flotilla destinada al Golfo
La fragata Victoria y las corbetas Vencedora e Infanta Elena partieron ayer por la mañana de las bases de Rota (Cádiz) y Cartagena (Murcia) hacia el golfo Pérsico, donde relevarán, en fecha aún no determinada, a los otros tres buques españoles situados en la zona desde hace tres eses. Marineros y familiares de los mismos expresaron, en medio de una emocionada despedida, su malestar por no haber sido avisados con tiempo para despedirse. Dos marineros de las corbetas no se presentaron a la hora de zarpar.El Gobierno español difundió un comunicado en el que muestra su enérgica condena por el "trato inhumano" que Irak está dando a los prisioneros alidos. El jefe del Ejecutivo despachó ayer con el Rey sobre la situación del conflicto. La noche anterior, Felipe González habló con los líderes de los principales partidos, salvo Julio Anguita, coordinador de Izquierda Unida. El secretario de la Conferencia Episcopal Española, Agustín García-Gascó, declaró ayer que la guerra del Golfo "no es íusta", pero señaló que los obispos no difundirán documento alguno sobre el conflicto.
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