Embajadas, bases y puestos fronterizos refuerzan al máximo su seguridad

Las Fuerzas de Seguridad del Estado incrementaron al máximo la vigilancia en embajadas, consulados y residencias de diplomáticos en España de países árabes y occidentales considerados como sensibles, así como de los aeropuertos y puestos fronterizos, tras el estallido de la guerra en el Golfo y ante el temor a posibles atentados de grupos terroristas proiraquíes. Dos unidades de reserva del Cuerpo Nacional de Policía con bases en Toledo y Ciudad Real se encuentran en Madrid para reforzar la vigilancia en los mencionados puntos.

El minigabinete de crisis había estudiado en su reunión de la tarde de ayer la posible participación del Ejército, corno ya sucede durante la jornada electoral, en la protección de repetidores de televisión, líneas de alta tensión, etcétera, pero todavía no se ha concretado.

La embajada de los Estados Unidos, situada en una céntrica calle madrileña, está vigilada por numerosos efectivos policiales y de la Guardia Civil, mientras dos carriles de la calle han sido cortados con vallas a la altura de la legación. La embajada de Kuwait en Madrid ha recibido ya varias amenazas de bomba esta semana.

La base aérea de Torrejón mantenía a primera hora de la madrugada, poco después de iniciado el bombardeo de Bagdad, un movimiento de aviones similar al de días anteriores, con un despegue o aterrizaje cada cuatro minutos, según fuentes del Centro de Control de Paracuellos citadas por la agencia Efe.

La situación en la base de Rota (Cádiz) era a primera hora de la madrugada de tranquilidad. Una patrulla del Ejército español y otra de la Policía Militar estadounidense vigilaban la entrada a la base y revisaban la documentación de todos los trabajadores que llegaban a la misma, según informa Juan Méndez. Los turnos de trabajo son, desde el pasado martes, de 24 horas con intervalos.

En la base aérea de Zaragoza, donde la situación en la madrugada era de tranquilidad, las tropas norteamericanas se encuentran acuarteladas. Todos los estadounidenses, que residen con sus familias en barrios próximos a la base, han abandonado sus viviendas y se encuentran alojados dentro de la base.

El Gobierno Civil de Tarragona ha ordenado el incremento de las medidas de seguridad exterior de los complejos industriales y de producción energética de la provincia, ante la posible escalada de atentados terroristas, informa Josep Garriga.