Dos duros golpes de la censura a la 'glásnost'
La glásnost ha recibido dos serios golpes: la suspensión indefinida del popular programa televisivo Vzgliad y la confiscación de los bienes de la agencia de noticias independiente Interfax. Ésta ha sido expulsada del edificio de Radio Moscú y todos sus bienes han sido confiscados por orden del conservador presidente de Radiotelevisión Soviética, Leonid Krávchenko. Según la última información que transmitió la agencia, se trata de una política deliberada por parte de las nuevas autoridades de los medios de difusión para "liquidar las estructuras informativas independientes".
Vzgliad, teleprograma que era el símbolo de la libertad de expresión comenzada en época de la perestroika y que contaba con una audiencia de más de 90 millones de personas, había sido prohibido las dos semanas anteriores por tratar de analizar la dimisión del ministro de Exteriores, Edvard Shevardnadze. Ahora la prohibición es indefinida.
Según el popular periodista Yevgueni Dódolev, lo que sucede con Vzgliad "es sólo el reflejo de las tendencias políticas generales".
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