Rechazada la reprobación de Solchaga y Borrell

La reprobación del ministro de Economía y Hacienda, Carlos Solchaga, y del secretario de Estado de Hacienda, José Borrell, que presentó ayer el Grupo Popular en el Congreso fue rechazada por el Pleno al contar sólo con 94 votos del propio PP. El diputado popular José Manuel García Margallo pidió el cese de ambos por el proyecto de revisión catastral, ahora suspendido.García Margallo, sin embargo, aseguró que su grupo estaba dispuesto a "cerrar los ojos y retirar la reprobación" si el PSOE aceptaba cuatro condiciones de tipo técnico que éste último rechazó de plano: una ley específica para regular el catastro, la modificación de la Ley de Haciendas Locales, la supresión de la imputación en renta del valor de la vivienda en el IRPF y la deducción de lo pagado en el impuesto sobre bienes inmuebles en otro impuesto, el aplicado sobre el patrimonio.

El debate se desarrolló ayer noche en el Congreso con una serie de discursos plagados de bromas, aplausos, abucheos y risas por parte de uno y otro lado de la Cámara.

La reprobación contó con el respaldo de los diputados del PP con la abstención de Izquierda Unida y del Gupo Catalán y el rechazo del resto, encabezados por el PSOE.

Río revuelto

La defensa de Solchaga y Borrell corrió a cargo del diputado socialista Justo Zambrana, que inició su respuesta al PP con la siguiente cita moral: "¿Por qué al juzgar a los demás pones en tu crítica el amargor de tu propio fracaso?". Zambrana aseguró que el grupo que encabeza José María Aznar ha intentado "ir a pescar a río revuelto sin éxito".

El diputado popular, en el turno de réplica, aseguró que no sabía "a qué río revuelto" se estaba refiriendo su compañero del PSOE. En opinión de García Margallo, "el río estaría menos revuelto si se hicieran las cosas de acuerdo con la legalidad".

Zambrana aseguró que "el PP no tiene análisis europeo", y que había comparado el catastro con el poll tax (impuesto local muy contestado en el Reino Unido) "por ignorancia". García Margallo replicó que el europeísmo del PSOE es similar al de un cantón suizo que, además, se precia de haber inventado el reloj de cuco, en referencia a la película de Orson Welles El tercer hombre. Además, según García Margallo, nadie en el Grupo Popular ha comparado el catastro con el poll tax. "Lo que se ha comparado es la picia política". A su juicio, "con una picia como ésta se va uno a casa".

Y eso fue lo que hicieron los parlamentarios después de aceptar una parte de la enmienda del Grupo Catalán sobre la conveniencia de discutir la revisión catastral dentro de la reforma fiscal.