Mueren 12 jóvenes italianos al estrellarse un avión militar contra una escuela

Doce jóvenes resultaron muertos y más de 100 heridos al precipitarse un avión militar italiano Macchi MB-326, monoplaza, contra la escuela técnico-comercial Gaetano Salvemini, de la localidad italiana de Casalecchio di Reno, en la periferia de la ciudad de Bolonia. Al aparato se le bloqueó el motor y se incendió antes de caer sobre la escuela. El piloto, Bruno Viniani, de 26 años, logró salvarse al lanzarse en paracaídas tras haber intentado en vano aterrizar sobre un campo.

El trágico accidente creó escenas de pánico entre los 200 alumnos del colegio, todos ellos con edades comprendidas entre los 15 y 18 años. Los alumnos vieron desde las ventanas cómo el avión en llamas se dirigía hacia la escuela.Una alumna comentó: "Estaba en clase y he visto cómo el avión volaba a baja altura y se dirigía hacia nosotros, y grité: ¿qué hace?, ¿está loco?". Antes de que pudieran darse cuenta, el avión entró en el edificio abriendo un enorme boquete en la pared. Afortunadamente, los alumnos de la clase donde entró el aparato se encontraban en ese momento fuera del aula.

El fuego se extendió rápidamente por el resto del edificio, y los muchachos, aterrorizados, se lanzaban desde las ventanas. Otros, bloqueados por el terror, se quedaban agarrados al pretil de las mismas.

Como es tradición en la eficiente ciudad de Bolonia, antes de que transcurrieran siete minutos ya habían entrado en funcionamiento los servicios de asistencia y ayuda. Los heridos, según el grado de gravedad, fueron distribuidos en helicópteros y coches de la policía por varios hospitales.

Los bomberos rescataron a un centenar de alumnos que habían buscado refugio en el tejado de la escuela.

El piloto, que ha sufrido sólo fractura de tres costillas, no ha querido hacer declaraciones por considerar que se encontraba "en acto de servicio". Poco antes de la tragedia comunicó a la torre de control del aeropuerto de Bolonia, donde tenía previsto su aterrizaje, que se habían bloqueado los instrumentos de navegación y que un motor estaba ardiendo. Poco después el piloto se lanzaba en paracaídas.

El MB-326 estaba considerado como el avión italiano de mayor éxito de la posguerra. Puede ser utilizado en misiones de entrenamiento o de combate. Además de las italianas, utilizan este aparato las fuerzas aéreas de países de África, Oriente Próximo, América Latina y Australia.