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El socialista Jaime Blanco, nuevo presidente cántabro con el apoyo del Partido Popular

Los siete diputados del Partido Popular de Cantabria apoyaron anoche al candidato socialista a la presidencia regional, Jaime Blanco, en sustitución del censurado Juan Hormaechea. En la votación, que se retrasó por una amenaza de bomba, Blanco obtuvo 26 votos, mientras que 12 diputados votaron en contra de la moción y uno se abstuvo. El candidato socialista sólo necesitaba 20 votos para su elección. El nuevo Consejo de Gobierno, presidido por Blanco -que se espera que jure su cargo a finales de la semana que viene-, estará constituido por tres consejeros de su partido, otros tres populares, uno regionalista y otro centrista.

A favor de la moción de censura votaron los 12 diputados del PSOE, los siete del Partido Popular, los tres regionalistas, los dos del CDS y dos del Grupo Mixto. Además de Hormaechea, votaron contra la moción tres de sus consejeros y ocho representantes del Grupo Mixto. La única abstención fue la del también miembro del Mixto y ex representante socialista Antonio Lombardo.La votación estaba prevista para las 21 horas, pero hubo de retrasarse 30 minutos al recibirse una llamada que anunciaba la existencia de una carta-bomba en la cartera de un diputado, lo que motivó el desalojo de la Asamblea.

Finalizado el acto, Hormaechea se acercó a saludar a Jaime Blanco y al líder regionalista, Miguel Ángel Revilla, uno de sus principales críticos en este debate.

El nuevo presidente cántabro, en una de sus intervenciones previas a que se votase la moción, manifestó: "MI Gobierno será de gestión, ni socialista ni de coalición, un Gobierno que administre para seis meses los recursos de esta región". Blanco recalcó que su partido y el PP tendrán mayor protagonismo en ese Ejecutivo, "porque ambos tuvieron el mayor respaldo electoral", pero reclamó la colaboración de centristas y regionalistas.

Previsiblemente, ningún diputado, exceptuados Blanco y el líder regional del PP, José Luis Vallines -quien ejercerá la vicepresidencia de nueva creación-, accederán al Gobierno regional.

A lo largo de la jornada, que se inició a las nueve de la mañana, se debatió la moción de censura presentada por los populares -independiente de la reprobación socialista- y que proponía como candidato a José Luis Vallines.

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El dirigente del PP dedicó casi todo su discurso a criticar al presidente censurado: "Entendemos", dijo, "que el actual presidente no ha representado dignamente el papel que le otorga el Estatuto y ni el Estatuto ni Cantabria pueden permanecer al margen de lo que aquí ha ocurrido".

Profundas diferencias

Se refirió a la distorsión profunda de la vida política que Cantabria ha sufrido y subrayó que en el transcurso de este año existieron tan profundas diferencias con el presidente que ya se planteó la posibilidad de una moción de censura contra él.

Vallines recordó el primer gran envite que Hormaechea hizo en 1982 al PP cuando amenazó con renunciar al cargo. ;,si tragan esto, debió pensar usted, ya tragarán más cosas. Y tragamos entonces en función le la responsabilidad cuando teníamos que haberle dicho basta, basta", señaló el dirigente popular.

Hormaechea respondió a Vallines reprochándole que , cuando se demanda un imposible es que no se quiere lo posible" y luego sugirió un pacto: "Somos 20 entre ambos grupos: ustedes siete votos y nosotros 13 que juntos hacen la mayoría. Usted ha asegurado que me ofreció dimitir, pero nunca ine habló de ello. Podremos en el futuro constituir la mayoría v atender los compromisos".

Hormaechea agregó, fuera del hemiciclo, que la última encuesta asegura a su nuevo partido un 42% de los votos en Cantabria que le proporcionarían 19 diputados.

Empujado por la policía

Jaime Blanco García, de 46 años, es médico en excedencia del hospital Valdecilla. Estudió la carrera en la universidad de Sevilla y sus primeras inquietudes políticas datan de aquella época.Desde hace 15 años pertenece al partido socialista y el carné número uno de Cantabria está a su nombre. En 1977 consiguió su primer acta de diputado. Posteriormente, frente a los conservadores José Antonio Rodríguez y Ángel Díaz de Entresotos, fue derrotado en las elecciones autonómicas.

Su apellido adquirió resonancia nacional en 1978 cuando fue golpeado por la policía en el curso de una manifestación. El incidente dio lugar a una gran confrontación parlamentaria entre socialistas y centristas.

Está casado con Rosa Inés García, concejal socialista en el Ayuntamiento de Santander y secretaria de organización del partido en Cantabria. Divorciado de María de los Ángeles Ruiz Tagle, médico de profesión y hermana de la mujer del ex presidente de la Junta de Andalucía, Rafael Escuredo.

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