El PP no impedirá la elección de Blanco como presidente cántabro
El PSOE y el Partido Popular (PP) encabezarán un Gobierno de gestión en Cantabria, compuesto por socialistas, populares, centristas y regionalistas, una vez que las dos fuerzas mayoritarias se pusieron ayer de acuerdo en destituir al actual presidente, Juan Hormaechea, y en promover un Gabinete de transición hasta las elecciones autonómicas del próximo mes de mayo. A última hora de la tarde el comité ejecutivo del Partido Popular dio el visto bueno para la consecución de un acuerdo en virtud del cual el PSOE, cuyo candidato es Jaime Blanco, asuma la presidencia del Gobierno autónomo y tres consejerías y los populares desempeñen la vicepresidencia y cuatro consejerías.
Según dicho acuerdo, tanto un representante del CDS como otro del Partido Regionalista de Cantabria formarían parte del Gabinete como consejeros sin cartera.Esta fórmula contaba con el beneplácito del PSOE y, por tanto, tenía anoche todos los visos de convertirse en la composición del Ejecutivo cántabro una vez que triunfe la moción de censura del PSOE contra Juan Hormaechea con la amplía mayoría de votos que le garantiza el respaldo de 26 diputados autonómicos.
El secretario de organización del PSOE, Txiki Benegas, y el secretario regional de los socialistas cántabros, Jaime Blanco, se reunieron ayer en un despacho del Congreso de los Diputados con el secretario general y vicesecretario general del PP, Francisco Alvarez Cascos y Juan José Lucas, respectivamente, y con el presidente regional de este partido en Cantabria, José Luis Vallines, para negociar la elección de un nuevo presidente.
El hecho de que la moción de censura contra Hormaechea presentada por el PSOE cuente con el apoyo de 19 diputados en la asamblea regional, es decir, a falta de un voto para obtener la mayoría exigida, convierte a Jaime Blanco en el virtual triunfador.
Un éxito que en modo alguno se reflejaba ayer en expresiones de satisfacción por su parte, quizá porque él se resistió hasta el último momento a presentar una moción de censura contra Hormaechea y tuvo que ser la ejecutiva federal del PSOE quien se lo recomendase.
Negociaciones
Durante la negociación, los dirigentes del PP renunciaron a contar con la mayoría en el Gobierno de gestión y, a cambio de conservar la presidencia, que ocuparía José Luis Vallines, y dos consejerías, ofrecieron a los socialistas la vicepresidencia, de nueva creación, y cuatro consejerías, mientras que reservaban una para el CDS y otra para el Partido Regionalista.Pero el curso de la negociación mantenida por la tarde indicaba, en cambio, que el PSOE obtendrá finalmente la presidencia, gracias a los votos socialistas, centristas, regionalistas e incluso del PP, mientras que al PP corresponderá la vicepresidencia del Consejo de Gobierno. Aunque el reparto de las consejerías se encontraba pendiente de las últimas conversaciones, en todo caso se consideraba segura la presencia en el Gobierno autonómico del presidente de los centristas cántabros, Manuel Garrido, y del máximo dirigente del PRC, Miguel Ángel Revilla.
Tanto Juan José Lucas, que había preparado las negociaciones con Abel Caballero, secretario de política institucional del PSOE, como Alvarez Cascos, interlocutor de Benegas, resaltaron ayer que preferían la opción de "higienizar" la política institucional en Cantabria, aunque sea al precio de entregar la presidencia de la comunidad al PSOE. Los populares aceptaban incluso la perspectiva de una significativa pérdida de votos en las elecciones autonómicas del próximo mes de mayo.
Por su parte, los máximos dirigentes del PSOE de Cantabria han encajado la decisión de la ejecutiva federal de asumir la presidencia de la Comunidad como una obligación incómoda.
Días atrás, colaboradores de Jaime Blanco mantenían la postura de que "no interesaba" al PSOE de Cantabria hacerse cargo del Gobierno de la comunidad a sólo cinco meses de las elecciones. Hoy, a las diez de la mañana, presentará el PSOE su moción de censura en el Parlamento de Cantabria.
También hoy mismo, el actual presidente cántabro, Juan Hormaechea, replicara, y mañana, miércoles, el PP presenta su propia moción.
