Los ministros de Exteriores chino y soviético debaten hoy su actitud ante la crisis

CARLOS YÁRNOZ, ENVIADO ESPECIAL, El ministro de Asuntos Exteriores de la URSS, Edvard Shevardnadze, se entrevistará hoy en la ciudad china de Urumqi, en la frontera con la URSS, con su homólogo de la República Popular China, Qian Qichen, con quien abordará la actual situación de la crisis del golfo Pérsico y la posibilidad de que el Consejo de Seguridad de la ONU -en el que ambos países son miembros permanentes, junto con EE UU, Francia y el Reino Unido- adopte medidas contra Irak que vayan más allá del bloqueo comercial.

La entrevista se produce sólo unos días después de que los presidentes George Bush y Mijaíl Gorbachov trataran el mismo problema en la cumbre de París y 10 días más tarde del encuentro que mantuvieron en Bagdad Qian Qichen y el líder iraquí, Sadam Husein.China es partidaria de "agotar al máximo todas las vías pacíficas" para solucionar la crisis del Golfo, y así se lo transmitió ayer Qian Qichen al ministro español de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, quien recibió el anuncio del encuentro chino-soviético nada más llegar al aeropuerto de Pekín. Hasta ahora, la República Popular China ha apoyado todas las resoluciones del Consejo de Seguridad adoptadas contra Irak, ha pedido públicamente la retirada de Kuwait y ha exigido la liberación de todos los rehenes (5.000 de ellos son chinos).

Esta actitud china ha tenido como consecuencia, entre otras, el levantamiento en octubre pasado de las sanciones económicas -excepto en el ámbito militar- impuestas por la CE a Pekín a raíz de los sangrientos sucesos de la plaza de Tiananmen, en junio de 1989.

Fernández Ordóñez, a quien Qian relató su entrevista con Sadam fue ayer muy cauto al explicar la posición china. "Es algo sometido a la máxima discreción" señaló. Sin embargo, el propio Fernández Ordóñez expresó a Qian su "satisfacción" por la actuación china en el Consejo de Seguridad.

Nueva resolución

En estas fechas, y según trascendió tras la cumbre de París, todo parece indicar que los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU están elaborando una nueva resolución contra Irak que podría concretarse en un último aviso a Bagdad antes de abordar el posible uso de la fuerza. "Algo se está explorando", comentó Fernández Ordóñez.

Shevardnadze, con toda probabilidad, informará hoy a Qian sobre las líneas maestras de esa posible resolución. En París, y además de los encuentros de Bush y Gorbachov, también representantes de Francia y el Reino Unido aprovecharon la cumbre para discutir sobre la crisis del Golfo. Por tanto, Qian fue el único país miembro permanente del Consejo de Seguridad ausente de la capital francesa, razón que da una mayor trascendencia a la entrevista con Shevardnadze. Por el contrario, China ha sido el único país de ese consejo que ha enviado a su ministro de Asuntos Exteriores para hablar con Sadam Husein en Bagdad.

Pekín, según observadores occidentales en la capital china, teme las consecuencias económicas que le acarrearía un conflicto armado en el Golfo. Pero, a su vez, también desea facilitar la iniciada normalización de sus relaciones económicas con Occidente, por lo que probablemente acabará alineándose con lo que decida el resto de los países miembros permanentes del Consejo de Seguridad.

Shevardnadze y Qian también hablarán de otros problemas de seguridad bilaterales, cuando las antiguas tensiones fronterizas se han ido suavizando en los últimos años. Los ministros chino y soviético también abordarán la situación de las dos Coreas, Afganistán y Camboya. Ayer, precisamente, Pekín anunció que China ha decidido suspender el envío de armas a la guerrilla camboyana.