Corcuera anuncia en Rabat formas flexibles de visados para Ceuta y Melilla

España articudará formas flexibles de visados para los ciudadanos marroquíes que trabajan o visitan habitualmente Ceuta y Melilla. Éste es uno de los acuerdos adoptados ayer por el ministro español del Interior, José Luis Corcuera, y su homólogo marroquí, Dris Basri, en una reunión celebrada en Rabat. El ministro español aseguró que en las conversaciones mantenidas con los técnicos marroquíes no se había abordado la cuestión de los tres saharauis que en el mes de octubre pidieron asilo político en la Embajada de Rabat, entre otras razones porque tienen "garantías suficientes" de que se encuentran en libertad.

Los problemas relativos a la inmigración, los visados y la colaboración policial en la lucha contra el tráfico de estupefacientes fueron genéricamente los tres grandes temas en torno a los cuales giraron las conversaciones mantenidas ayer por Corcuera y Basri. La reunión se celebró en el Ministerio del Interior, en el barrio de las embajadas de Rabat, y duró aproximadamente dos horas.El ministro Corcuera estuvo acompañado por el director de la Guardia Civil, Luis Roldán, y por el director general de política interior de su propio ministerio, Fernando Puig de la Bellacasa. Entre los dos responsables de la cartera de Interior existe además una relación profesional muy fluida, ya que habitualmente coinciden cada seis meses en las reuniones del Grupo de Trevi, en las que Marruecos participa en calidad de observador. Para el próximo mes de diciembre está prevista que se celebre en Madrid una nueva reunión de técnicos de los dos ministerios. En esta nueva reunión se acabarán de perfilar los acuerdos adoptados ayer en Rabat.

Los inmigrantes que viven ilegalmente en España fue una de las cuestiones más espinosas y delicadas abordadas también en la reunión. Madrid y Rabat se han propuesto estudiar una solución para esta cuestión, sobre todo en aquellos casos de ciudadanos marroquíes que vivían en España antes de que se aprobara la ley de extranjería y que tras su entrada en vigor se encuentran en situación ilegal.

En opinión de Corcuera, en España hay muchos menos marroquíes en situación irregular que los estimados por las asociaciones humanitarias. Recalcó tajantemente no ser ciertas las cifras de 50.000 o 60.000 barajadas por estas asociaciones, aunque reconoció que el número de marroquíes en situación irregular es superior a la de los legales. Precisó que aproximadamente hay en España unos 20.000 ciudadanos en situación de irregularidad.

Corcuera y Basri han acordado establecer una "línea caliente" que permita coordinar y efectuar operaciones de represión contra el tráfico ilícito de drogas. Una comisión de ténicos del Ministerio del Interior marroquí se trasladará próximamente a España para conocer personalmente el material antidisturbios utilizado por la policía en nuestro país.

Corcuera se entrevistó con el primer ministro, Azzeddin Laraki, y además con los ministros de Trabajo, Hasan Abbadi, y el de Relaciones con los Emigrantes, Rafiq Haddaui.