Los partidos pactan los nombres de los consejeros de RTVE sin reformar el estatuto

Las cúpulas de los partidos de la oposición parlamentaria están negociando con el PSOE la composición del nuevo Consejo de Administración del Ente Público Radiotelevisión Española al mismo tiempo que reivindican la reforma del estatuto, que los socialistas rechazan. El PSOE sólo está interesado en cambiar un consejo que mantiene su carácter provisional desde octubre de 1989, fecha de las elecciones legislativas y momento en el que se debía haber renovado.

El objetivo de los socialistas es que la próxima semana se llegue a un acuerdo para la elección del nuevo Consejo de Administración una vez que todos los grupos a quienes se ha llamado a participar han aceptado el reparto numérico que excluye a Izquierda Unida.Así, el PSOE contará con seis miembros, cuatro el Partido Popular, uno el CDS y otro Convergéncia i Unió.

El PSOE todavía no ha manifestado quiénes serán sus candidatos y la misma reserva mantiene el Partido Popular. No obstante, este último partido cuenta como seguro para su cupo con el ex diputado José Antonio Trillo y con el que fuera ministro de Sanidad con Unión de Centro Democrático y posteriormente diputado popular, Jesús Sancho Rof.

Este partido también está barajando el nombre de algún representante de APLI, sindicato independiente de Radiotelevisión Española.

Con la elección de un miembro de este sindicato, los populares quieren dotar al consejo de un tinte profesional. Convergencia i Unió presentará casi con seguridad al periodista Jordi Bosch, y el CDS pretende renovar la confianza a su actual representante, Antonio del Olmo.

Mientras el presidente del Grupo Socialista, Eduardo Martín Toval, negocia la nueva composición con el portavoz del Grupo Popular, Rodrigo Rato, y el secretario general del Centro Democrático y Social, José Ramón Caso, así como con el dirigente de CIU, Miquel Roca, sus respectivos portavoces en la ponencia que estudia la reforma del estatuto de Radiotelevisión Española siguen actuando como si ésta fuera a llevarse a cabo.

Los portavoces de la oposición no parecen aceptar que el trabajo de varios meses quede como mera documentación y, no se lleve a la práctica. Es el caso del representante en esta ponencia y portavoz nacional del CDS, Antoni Fernández Teixidó, y de los diputados populares Javier Arenas y Luis Ramallo.

Falta de respeto

Ramallo y Arenas consideraron "obsoleto" el actual estatuto y, por tanto, necesaria su reforma. Arenas denunció ayer que "el PSOE está dejando morir la ponencia con una falta de respeto absoluto al Parlamento y a las personalidades que han pasado por ella durante meses para dar su opinión sobre la citada reforma". Ramallo fue tajante al señalar que el PP "en la reforma del estatuto va a seguir a muerte".Preguntados ambos portavoces populares sobre si no existía contradicción entre su denuncia y la actitud pactista de su partido en tanto que estaban dispuestos al cambio del consejo sin la reforma del estatuto, ambos se mostraron pragmáticos. Arenas señaló que no hay contradicción, sino que "la mayoría es la qué es" y por tanto si se, inicia una negociación para la renovación "hay que entrar en ella, aunque no suponga ningún pacto político, sino un pacto instrumental, dado que seguimos considerando necesar ¡a la reforma del estatuto". A juicio de Arenas, el actual consejo no tiene competencias que permitan su autonomía, por lo que el director general seguirá siendo "un virrey y los consejeros un coro".