Las medidas contra el narcotráfico fracasan en Gibraltar, según el Gobierno
El Gobierno reconoce que los antiguos grupos de contrabandistas que operaban en la zona de Gibraltar se han "reconvertido hacia el más lucrativo negocio del tráfico ilícito de drogas", contando con "modernos medios de transporte y redes de distribución muy organizadas". El Gobierno igualmente reconoce que el real decreto de 15 de septiembre de 1989 que regula el tráfico de embarcaciones de alta velocidad en las aguas marítimas españolas "ha tenido menos eficacia en aquella zona, por el hecho de que las lanchas tienen su base en Gibraltar". Esta respuesta la ofrece el Ejecutivo al diputado de Izquierda Unida Jerónimo Andreu que denunciaba el tráfico a través de planeadoras a la luz del día hasta las playas de la Línea de la Concepción y "el 'blanqueo' de dinero en Gibraltar", situaciones que contrastan con "la opacidad de diagnóstico y las medidas del Gobierno".
En la respuesta del Ejecutivo se parte de una constatación. "La situación geográfica de Gibraltar favorece la actuación de las bandas organizadas de narcotraficantes en un doble aspecto: por un lado, en lo relativo a la preparación de las operaciones de tráfico ilícito, desde las costas del norte de Marruecos hasta las playas del Campo de Gibraltar y, por otro lado, como paraíso fiscal en el que 'blanquear' los fondos obtenidos", escribe el ministro de Relaciones con las Cortes, Virgillio Zapatero.
El Gobierno reconoce que el problema principal -la eficacia de las lanchas que transportan la droga hasta las playas- no ha podido ser abordado toda vez que esa legislación para ese tipo de embarcaciones lógicamente sólo tiene efecto en España, mientras que tales lanchas tienen su base en Gibraltar.
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