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3.000 agentes desalojan a los 'squatters' en Berlín

Cerca de 300 personas fueron detenidas ayer en Berlín por la policía después de que 3.000 agentes desalojaran a los ocupantes ilegales de diez edificios de la calle Maguncia, en el barrio de Friedrichshain, en la parte oriental de la ciudad. Las autoridades berlinesas se tomaban así cumplida venganza por la violencia desatada por miembros de grupos anarquistas y de extrema izquierda que el lunes por la noche impidieron la entrada en esta calle de las fuerzas del orden levantando barricadas y lanzando bombas incendiarias y adoquines contra la policía.Fuentes policiales dieron la cifra de 137 policías heridos durante los enfrentamientos del lunes, algunos de ellos en estado grave. Por la mañana, el alcalde de Berlín, el socialdemócrata Walter Momper, acompañado por el jefe de la policía Georg Schertz y por el polémico. concejal de Interior, Erich Paetzold, ofrecieron una conferencia de prensa que puso en evidencia hasta qué punto el incidente de los squatters de la calle Maguncia y de otros barrios de Berlín Oriental, ha sido envenenado y magnificado por la campaña electoral que vive la ciudad.

Tras los incidentes del lunes, en los que las fuerzas de la policía fueron prácticamente derrotadas por los manifestantes, que a su vez no eran originarios de la parte oriental, sino que procedían. del famoso barrio alternativo occidental de Kreutzberg, Momper no podía dejar que su rival. electoral, la CDU del canciller Kohl utilizara el argumento de presentarse como garante del orden ante los votantes.

Al igual que el día de la unidad alemana, fuerzas especiales provinientes de los landers de Baja Sajonia y Renania del Norte-Westfalia, así como la famosa Guardia de Fronteras, una fuerza de élite especializada en guerrilla urbana, desembarcaron en la vieja capital del Reich. A las ocho empezó el asalto y dos horas después se consumó el desalojo. La policía tuvo primero que ocupar las barricadas construidas con adoquines levantados de la calle, para lo que utilizó excavadoras. Luego, apoyada con cañones de agua y tanquetas, entró casa por casa hasta desalojarlas todas.

Varios miembros de la Lista Alternativa y del grupo Alianza 90, que, paradójicamente, gobiernan en Berlín en coalición con el SPD, fueron detenidos. Según su portavoz se hallaban allí para intentar una salida negociada al conflicto. Incluso una de las heroínas de la revolución pacífica que hace un año derrocó al régimen comunista, la pintora Barbel Bohley, fue también detenida aunque posteriormente fue puesta en libertad.

Alrededor de 10.000 personas participaron ayer en una manifestación que partió de la plaza Senefelder para llegar al viejo ayuntamiento berlinés en la Alexanderplatz. Organizada por el PDS (comunistas renovados) y la coalición Bundnis 90, se convirtió, de hecho, en un acto electoral de estos grupos en contra de la política del SPD, pese a la presencia en la misma de los grupos alternativos y anarquistas protagonistas de la violencia y de la ocupación de viviendas.

Una presencia policial absolutamente desmesurada contrastó con la actitus pacífica de la mayoría de los manifestantes. Si bien, posteriormente, los elementos extremistas se dirigieron de nuevo hacia la calle Maguncia para intentar reconquistar las casas de las que habían sido desalojados. La presencia masiva de la policía les impidió cualquier otra acción que no fuera alguna trifulca menor acompañada por el lanzamiento de petardos.

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