Desalojado de madrugada un bloque de pisos al 'reventar' una viga maestra defectuosa

Los 55 vecinos del número 25 de la calle de Juan Álvarez de Mendizábal, en el barrio de Rosales, abandonaron sus casas en la madrugada de ayer ante el peligro de derrumbamiento. A la 1.17, la viga maestra del ala derecha del edificio de seis plantas reventó con un estampido que algunos confundieron con "un portazo". Una grieta se abrió desde la planta baja a la segunda. Algunos vecinos que dormían salieron a la calle en pijama o camisón cuando los bomberos ordenaron el desalojo. El primer piso se había hundido tres, centímetros. El bloque estaba tocado. La viga era defectuosa, según los técnicos.

Cuatro estudiantes que habitan el primero derecha fueron los primeros en ver las grietas. "Escuchamos un ruido fortísimo y vimos abrirse dos grietas en el pilar", relato una de las estudiantes, Silvia, en la calle con un plumas sobre el pijama.Los bomberos, alertados por los vecinos, revisaron el bloque y decidieron desalojarlo. Juan Padilla, del cuarto izquierda, no había oído nada: "A mi me despertaron los bomberos aporreando la puerta y diciendo que saliéramos que el bloque se derrumbaba".

El jefe de bomberos informó que la viga, de 50 por 20 centímetros, había reventado. "Las armaduras se han arqueado y el hormigón armado ha saltado. El primer piso se ha hudido tres centímetros", señaló.

Defectos de construcción

Los vecinos, entre ellos niños y ancianos, vestidos de cama y en zapatillas, tuvieron que elaborar en la calle una lista con los enseres que querían que los bomberos rescataran de sus casas, ya que se les prohibió la entrada. La mayoría durmieron en casas de familiares. Otros 21 fueron realojados por el Ayuntamiento de Madrid en hoteles.

Un técnico municipal informó ayer que el pilar no tenía 1 suficiente capacidad para so portar la estructura. Ricardo Peydró, concejal de Moncloa, afirmó: "Hoy en día no se admitiría una viga de esas condiciones". El inmueble, edificado por el constructor Pérez Vallejo, fue inaugurado en 1947.

"El desalojo seguirá hasta que se revise el edificio planta por planta", según Fernando Macías, arquitecto jefe del Departamento de Edificación Deficiente municipal, informa El Ayuntamiento apuntaló ayer la estructura.

"La rotura puede ser algo puntual en el estado del edificio o reflejar una pérdida en la capacidad de carga" añadió Macías. En el primer caso la solución será sustituir un pilar o cubrirlo con un refuerzo metálico.

En el segundo, la solución es más dificil y costosa.

Para Macías estos casos son difíciles de prever "porque en los edificios de hormigón el colapso se produce sin señales previas". Los vecinos del ala izquierda volverán pronto a casa. Los de la derecha tendrán que esperar un par de semanas.