El optimismo de las bolsas deja paso a la preocupación

El optimismo referente a la crisis del Golfo que se detectaba en los mercados durante los últimos días dio paso ayer a un estado de mayor preocupación debido, por un lado, al durísimo discurso del presidente Bush, en el que no admitía ningún tipo de compromiso que facilitara una salida a la crisis, y por otro el anuncio realizado por el secretario de Defensa, Richard Cheney, comunicando que por el momento continuaría el envío de tropas a Arabia Saudí.Ambos factores produjeron un cambio en las expectativas de los inversores que ahora ven pocas posibilidades de paz. El estado de ánimo se tornó tan sombrío que incluso surgieron rumores, más tarde desmentidos, respecto al lanzamiento de un ultimatum a Irak por parte de EE UU. En este contexto la cotización del petróleo aumentó fuertemente de forma que el brent para entrega en noviembre superó los 32 dólares por barril. Consecuentemente, las bolsas internacionales cotizaron a la baja con la excepción de Tokio, que subió 475 puntos, y de Francfort, que lo hizo en 3 puntos equivalentes a un 0,25%. Por su parte, París cedió un 1,27% mientras que Londres perdía un 1,03%. La bolsa londinense se vio afectada además por los malos resultados anunciados por la química ICI, cuyos beneficios descendieron un 48% en el tercer trimestre.

En Wall Street el moderado optimismo generado por el acuerdo alcanzado para reducir el déficit público, que aún debe ser aprobado por las cámaras, fue contrarrestado por el pesimismo relacionado con la crisis del golfo Pérsico y el alza de los precios del petróleo. En este contexto, al cierre de la sesión el índice Dow Jones arrojaba una pérdida de 20 puntos. Mientras -los bonos del Tesoro cotizaban favorablemente.